Muguruza despide a su técnico Sam Sumyk

Garbiñe Muguruza ha puesto fin a su vínculo profesional con Sam Sumyk. La tenista hispanovenezolana, de 25 años, cierra de esta forma un ciclo que arrancó en septiembre de 2015, cuando decidió prescindir de su entonces técnico, el gipuzcoano Alejo Mancisidor, y apostó por el preparador francés, de perfil más duro y que previamente había tutelado a otra jugadora de elevado nivel como Victoria Azarenka o la mediática Eugenie Bouchard.

“Unas palabras para anunciar el fin de una extraordinaria aventura. Dos Gran...

Garbiñe Muguruza ha puesto fin a su vínculo profesional con Sam Sumyk. La tenista hispanovenezolana, de 25 años, cierra de esta forma un ciclo que arrancó en septiembre de 2015, cuando decidió prescindir de su entonces técnico, el gipuzcoano Alejo Mancisidor, y apostó por el preparador francés, de perfil más duro y que previamente había tutelado a otra jugadora de elevado nivel como Victoria Azarenka o la mediática Eugenie Bouchard.

“Unas palabras para anunciar el fin de una extraordinaria aventura. Dos Grand Slams y el número uno mundial. Más que agradecida por estos cuatro años. Gracias Sam”, anunció la tenista a través de sus redes sociales a primera hora de este martes, una semana después de caer en la primera ronda de Wimbledon contra la 121 del mundo. Este fue el peor resultado en un major de la deportista desde el US Open de 2014, cuando tenía 20 años.

Juntos han ganado dos grandes, Roland Garros en 2016 y Wimbledon en 2017, aunque este último éxito coincidió con la presencia de Conchita Martínez en el banquillo debido a la ausencia del galo por cuestiones personales. De la mano alcanzaron también la cima del circuito, en septiembre de 2017, en un reinado que duró un mes. Y a ello se le suman el título de Cincinnati en agosto de 2017 y dos trofeos en Monterrey, obtenidos las dos últimas temporadas. Además, la hispanovenezolana se clasificó tres veces consecutivas para la Copa de Maestras en Singapur, donde llegó a alcanzar las semifinales.

No obstante, el nexo entre ambos también se caracterizó por los reiterados desencuentros, en más de una ocasión a pie de pista, ante el aficionado y las cámaras. Pretendía Muguruza (hoy día la 27 del mundo y la 22ª en la race de la WTA) dar un golpe de timón a su carrera cuando contrató a Sumyk y durante dos años obtuvo el efecto deseado, pero luego su tenis se estancó y comenzó a protagonizar tropiezos sonados hasta desembocar en la crisis de juego y resultados del presente.

La pasada semana, después de perder en su estreno en Londres, una respuesta de la tenista ya dejó entrever que podría producirse un movimiento. A la pregunta de si se planteaba un relevo en el banquillo, por primera vez no defendió al bretón Sumyk, de 50 años. “No sé, pero no quiero hablar de esto…”, respondió dolida. Ahora, ella y la multinacional IMG (que representa a los dos) barajan diversos nombres para dar con un sustituto o sustituta. En este sentido, desde su círculo trasladan que el proceso “llevará tiempo”.

Pese a los últimos acontecimientos, Garbiñe mantiene su calendario y retornará a las pistas a finales de este mes, el 29 de julio en el torneo de San José (Estados Unidos). Su objetivo es completar una buena gira norteamericana sobre cemento para tratar de enderezar el rumbo de cara al US Open, a partir del 26 de agosto.