Ferran Torres y Kang In, dos niños contra la roca

El Valencia se entrega a sus dos jóvenes talentos para remontar el partido de vuelta de la Copa ante el Getafe

Kang-In Lee, durante el partido de ida ante el Getafe. Icon Sportswire

Ferran y Kang In, contra la roca del Getafe. En un Valencia que parece que se ha impulsado camino de su estabilidad, los corredores ofensivos de Mestalla serán para los niños de Paterna, que serán protagonistas en la dura confrontación copera que le espera al equipo ante el guerrillero conjunto de Bordalás tras el 1-0 de la ida. Ellos pilotarán la tuneladora, ellos tendrán la misión de perforar ese bloque de granito que llega a Valencia con la ventaja del marcador que conquistó hace siete días en el Coliseum.

Ferran Torres lleva instalado en el primer equipo desde hace un año. En la vís...

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Ferran y Kang In, contra la roca del Getafe. En un Valencia que parece que se ha impulsado camino de su estabilidad, los corredores ofensivos de Mestalla serán para los niños de Paterna, que serán protagonistas en la dura confrontación copera que le espera al equipo ante el guerrillero conjunto de Bordalás tras el 1-0 de la ida. Ellos pilotarán la tuneladora, ellos tendrán la misión de perforar ese bloque de granito que llega a Valencia con la ventaja del marcador que conquistó hace siete días en el Coliseum.

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Ferran Torres lleva instalado en el primer equipo desde hace un año. En la víspera del Mundial sub-17 de La India, ante el creciente interés de Barça, Real Madrid, Juve y varios clubes de la Premier, el Valencia protegía a una de sus perlas con una cláusula de rescisión que pasaba de ocho a 25 millones de euros. Aquello fue en octubre, pero cinco meses después el director ejecutivo del club, Mateu Alemany, decidió protegerlo con un blindaje más potente de 100 millones y un nuevo contrato con validez hasta 2021.

Ferran, que cumple 19 años en febrero, ha dado un paso adelante en los últimos partidos. Después de pasar desapercibido dentro de una dinámica coral negativa que lo afectaba y que reprimía su potencial, el extremo rompió a jugar en la segunda parte de los dieciseisavos de Copa ante el Sporting. Una asistencia a Santi Mina y un gol espléndido —recortó con la izquierda y chutó con la derecha— marcaron su regreso. Cuatro días después, en Balaídos, firmó otro gran gol. Tras un centro al segundo palo de Gayà, abrazó la pelota con el pecho y con el exterior del empeine derecho, a bote pronto, la envió a la red. El sábado, ante el Villarreal, le puso otro balón magnífico a Rodrigo en un preciso centro combado. Dos goles y dos asistencias definen sus últimas y decisivas cuatro apariciones.

Marcelino, que hasta la fecha ha priorizado la Liga antes que la Copa, ha dejado que los niños de Paterna se fogueen en estas eliminatorias. Ferran, extremo puro, percute por la derecha mientras que por la izquierda y con tendencia a romper hacia el centro aparece Kang In, otro talento del mañana al que espera el Valencia, si es capaz de conservarlos a ambos. El coreano, mediapunta o segundo punta, está adaptándose a jugar en el costado izquierdo desde que Marcelino decidió que el Mestalla debe jugar como el Valencia.

Kang In, que llegó al Valencia con 10 años, acaba de irrumpir en el primer equipo. La baja de Guedes facilitó su entrada en las convocatorias. El genio coreano lleva toda la temporada entrenándose con los mayores y jugando con el filial. El Valencia, que renovó al jugador en verano, va a revisar de forma urgente su contrato. Intuye Mateu Alemany que su cláusula, de 20 millones de euros, es asequible para otros clubes. Por eso, dicha cláusula se elevará a los 80 millones, un blindaje antes de que Kang In cumpla 18 años, momento en el que los clubes que tiene detrás ya pueden lanzarse a por él sin ser penalizados por la FIFA. Y esa fecha está al caer: el 19 de febrero el pequeño Kang In será mayor de edad.

Kang In se ha presentado en la alta competición dejando destellos de su ingenio y de su creatividad. Con el balón es un malabarista, pero llama la atención su carácter. Choca con los rivales sin miedo pese a que todavía no tiene cuerpo de jugador de élite. Tampoco se arruga. Es tan intenso que en sus primeras acciones comete falta para marcar territorio. En Mestalla se volverá a ver con Damián Suárez, el lateral del Getafe que le dio un pisotón en el Coliseum que quedó sin castigo. Lanzar al Valencia camino de las semifinales de Copa será otra prueba de madurez para Ferran Torres y para él.

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