El presidente de RTVE defiende en el Congreso retirar a España de Eurovisión si Israel permanece: “No es un mero festival de canciones, su carga política es enorme”
“Ya veo que el monólogo de Marc Giró sobre el varón español no le ha gustado”, responde José Pablo López a un portavoz de Vox que duda si entrar “en RTVE con motosierra o con lanzallamas”
La tensión en las comparecencias periódicas del presidente de RTVE ante la Comisión Mixta Congreso-Senado de control a la corporación han aumentado progresivamente desde que José Pablo López comenzó a rendir cuentas parlamentarias a principios de año como consecuencia de su ejercicio en el cargo. De los primeros compases de florete se llegó al verano entre acusaciones lanzadas tanto desde Sumar como de Vox por incluir a La familia de la tele en la programación. Una vez constatado el fracaso de audiencias de aquella apuesta para las tardes del primer canal en la televisión pública, López cambió la parrilla de la nueva temporada con una sucesión de programas de actualidad donde tertulianos de diverso calibre comentan en bucle las noticias de la jornada mientras suceden. Las audiencias avalan de momento la apuesta y los grupos de la oposición al Gobierno reprochan al presidente de la corporación haberla entregado al “infoentretenimiento”. Y entre los recientes episodios que han amplificado la controversia está la decisión de López de retirar a España del festival de Eurovisión si Israel permanece en el certamen. Una maniobra defendida este jueves por su valedor en sede parlamentaria: “Todos somos conscientes de que Eurovisión no es un mero festival de canciones. Es algo más. La carga política que tiene es enorme. Lo sabemos todos, lo sabe la UER e Israel también lo sabe, y por eso lo utiliza para proyectar sus mensajes”.
Esta decisión de RTVE —en línea de la tomada anteriormente por las televisiones públicas de otros países como Países Bajos, Irlanda, Eslovenia e Irlanda— fue avalada por el consejo de administración por 10 votos a favor de los consejeros propuestos por el PSOE y sus socios en el Congreso, una abstención del consejero propuesto por Junts y cuatro votos en contra de los integrantes designados por el Senado a propuesta del PP. Y el presidente que impulsó la votación en el órgano de gobierno corporativo ha respondido durante su primera intervención en respuesta al senador del PNV Luis Jesús Uribe-Etxebarria Apalategui sobre los siguientes pasos a seguir: “Ya era hora de romper el silencio existente en la Unión Europea de Radiodifusión [UER, organizadora del certamen] con el genocidio en Gaza. El daño que la actual dirección de la UER está provocando al festival es inmenso”.
López ha recordado que RTVE preside actualmente el Grupo de Referencia de Eurovisión. Y ha añadido: “La expulsión de Israel excede claramente el mandato de este Grupo, por lo que hemos acordado remitir al Consejo Ejecutivo de la UER un informe al respecto. Posteriormente, según ha indicado la UER, la decisión se tomaría por votación en la asamblea de Ginebra en diciembre. Espero que por el bien de la UER no tengamos que llegar a ese punto de someter a toda la estructura a una votación final por la decisión de sus directivos, que no han asumido sus responsabilidades y no han dado un paso al frente”.
Respecto a la nueva programación de Televisión Española, el portavoz de Vox Manuel Mariscal Zabala ha acusado al presidente de la corporación y a los colaboradores de los nuevos espacios de actualidad de “insultar y reírse en la cara de los españoles”. Y antes de arremeter contra los presentadores de espacios como Mañaneros 360º, Malas Lenguas, Directo al grano o Futuro imperfecto, ha añadido: “Se insulta desde RTVE a los que criticamos al Gobierno llamándonos idiotas, como Sarah Santaolalla el pasado 27 de agosto”. Para el portavoz del partido ultra solo hay una duda en caso de llegar a formar parte de un Gobierno: “¿Entramos a RTVE con motosierra o con lanzallamas?“. José Pablo López ha respondido con una observación: ”Ya veo que el monólogo de Marc Giró sobre el varón español [en el programa de TVE Late Xou] no le ha gustado“. Y ha desgranado una serie de principios para los que según él no está concebida RTVE. Entre otros, “no promover el señalamiento al que piensa diferente”; “ni para usar estadísticas manipuladas que señalan al inmigrante como origen de los problemas de nuestra sociedad”; “ni para atacar a las lenguas cooficiales”; “ni para blanquear y exaltar el franquismo”; “ni ocultar el genocidio que se está viviendo en Gaza y defender la masacre de civiles y de niños”.
Para el PP, según sus portavoces, todo lo que representa José Pablo López es “Telepedro”, en el caso de los canales públicos, y “Radiopedro” en lo referente a Radio Nacional de España. Con ambos conceptos, sobre todo el primero, han martilleado sus interpelaciones al compareciente. El presidente de RTVE se ha fajado defendiendo su gestión y las audiencias frente a las de las televisiones públicas de las comunidades autónomas gobernadas por los populares. Frente a las acusaciones de “manipulación, sectarismo y derroche de deuda”, López ha contrapuesto cifras y defendido a los presentadores y colaboradores de los nuevos programas a los que la oposición al Gobierno considera concebidos “a mayor gloria de Pedro Sánchez”. También ha mostrado su sorpresa por la alusión a Radio Nacional, “donde está Juan Ramón Lucas, que escribía hasta hace poco en el diario La Razón columnas muy críticas con el presidente del Gobierno”.
La diputada del PP Macarena Montesinos ha acusado al dirigente de la corporación de “haber firmado el acta de defunción del servicio público”. Y López ha respondido que “reforzar lo público es reforzar la democracia”. Y mirando a la diputada Montesinos, ha concluido: “Quebrar lo público es quebrar la democracia. Y eso es lo que ha hecho usted hoy aquí”. A continuación, la senadora popular Carmen Riolobos le ha catalogado como “el nuevo sustituto del señor Ábalos en el grupo socialista, por lo que hemos visto”. El compareciente ha mostrado su sorpresa por la comparación y ha rematado: “No me lo esperaba de usted, pensé que tenía más clase. Pero ha quedado claro el respeto que predica el Partido Popular en este Congreso”.