Detenido un taxista que utilizaba su vehículo para vender cocaína
La Policía Municipal le descubrió cuando subió un cliente que no pagó en Centro
Agentes de la unidad de Centro-Norte de la Policía Municipal de Madrid han detenido a un taxista que utilizaba su vehículo para traficar con pequeñas cantidades de droga. Los clientes subían a su coche y compraban la mercancía conforme circulaba, según pudieron comprobar los funcionarios que lo arrestaron.
La detención se produjo a las 21.50 del pasado 28 de julio cuando dos policías municipales se percataron de que un taxi Toyota Prius estaba circuland...
Agentes de la unidad de Centro-Norte de la Policía Municipal de Madrid han detenido a un taxista que utilizaba su vehículo para traficar con pequeñas cantidades de droga. Los clientes subían a su coche y compraban la mercancía conforme circulaba, según pudieron comprobar los funcionarios que lo arrestaron.
La detención se produjo a las 21.50 del pasado 28 de julio cuando dos policías municipales se percataron de que un taxi Toyota Prius estaba circulando, pese a que en la capilla (luminoso colocado en el techo del vehículo en el que se refleja la tarifa según la zona) llevaba puesto el cero. Esto supone que el conductor tenía que estar parado, mientras sube o baja un pasajero.
Los agentes le vieron en la calle de la Madera (barrio de Universidad) y decidieron seguirle a ver qué hacía. Al poco tiempo, se subió un supuesto viajero y se montó en el asiento delantero. Los policías se pusieron a su altura y vieron cómo el pasajero entregaba dos billetes de 20 euros al taxista. Este le devolvió un billete de 10 euros y una bolsita de plástico con una sustancia blanca. A los pocos metros, el viajero se bajó, sin abonar ninguna cantidad por la carrera.
Los policías cerraron el paso al taxista y registraron el vehículo. En un portaobjetos colocado en el techo, llevaba 11 papelinas de cocaína envueltas en un pañuelo de papel. Fue arrestado por un delito contra la salud pública (tráfico de drogas). El detenido es un español de 44 años que hasta entonces carecía de antecedentes policiales.
Uno de los agentes siguió al comprador y le incautó la papelina y el dinero que le había devuelto como prueba del trapicheo de droga.