La exuberancia de Bunbury

Desde que abandonara Héroes del Silencio, Bunbury se ha convertido en uno de los iconos del rock español. Exuberante y exagerado en ocasiones, lo cierto es que posee un estilo único y personal y sus seguidores adoran esas formas grandilocuentes de cantar y de comportarse. Ha transitado por muchos estilos, desde la electrónica, al rock épico, las canciones de inspiración popular hasta las de raíces latinas.

Esa personalidad y entrega la lleva hoy al ...

Desde que abandonara Héroes del Silencio, Bunbury se ha convertido en uno de los iconos del rock español. Exuberante y exagerado en ocasiones, lo cierto es que posee un estilo único y personal y sus seguidores adoran esas formas grandilocuentes de cantar y de comportarse. Ha transitado por muchos estilos, desde la electrónica, al rock épico, las canciones de inspiración popular hasta las de raíces latinas.

Esa personalidad y entrega la lleva hoy al WiZink Center, donde mañana estarán los alemanes Helloween, una de las bandas más destacadas del metal europeo desde que comenzó su andadura a principios de la década de los ochenta. Otro rockero español, Leiva, de corte más stoniano y bien aferrado a la escuela madrileña, agota la entradas para sus dos conciertos de hoy y mañana en La Riviera. Desde que dejara al exitoso dúo Pereza, Leiva se ha sabido mantener fiel a un estilo, cantando a la vida cotidiana, los personajes de la calle, la amistad y las relaciones entre sexos.

Pero si alguien destaca estos días por hacer canciones sublimes retorciendo el lenguaje, jugando con la palabra, el surrealismo y lo absurdo, pero todo dentro de una lógica aplastante, es el uruguayo Leo Masliah. Se le podría considerar un genio por su manera de componer, de tocar el piano, de escribir textos brillantes e irónicos si no fuera por lo de “suerte al nacer” que acarrea el término, y él ha sido un trabajador incansable en sus poco más de sesenta años de vida. Sus descacharrantes canciones suenan hoy en San Lorenzo del Escorial después de haber dejado a tanta gente atónita en sus últimas apariciones en el Café Berlín.

Aclamado también como actor por su participación destacada en la afamada serie televisiva Los Soprano, el estadounidense Steven Van Zandt es uno de los músicos más reconocidos del rock mundial, aunque se le conozca más como Little Steven y por haber acompañado durante años a Bruce Springsteen como miembro de The E Street Band. Hoy actúa en Carabanchel con su banda The Disciples of Soul.

Las músicas negras pasan ineludiblemente por el festival anual de Gospel que arranca su vigésimo tercera edición con Spirit of New Orleans Project y se prolongara hasta Navidad. También por la banda formada en Barcelona Funkystep & The Sey Sisters, que además llegan al Clamores avalados por el proyecto GPS (Girando Por Salas), que impulsa el INAEM (Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música). Negritud aportan también los gallegos The Soul Jackets, que estarán un día después en el mismo escenario; y la londinense Nadia Rose, aunque la suya sea una apuesta más precisa por el rap y el hip hop.

El flamenco cambió el rumbo en los setenta gracias a propuestas como la del dúo Lole y Manuel, y mañana Lole Montoya estará repasando su biografía musical en el Berlín. La electrónica industrial centra una vez más una nueva edición del festival anual Dark Christmas, que este año se salda con la presencia de Automatic Empire, Solar Fake y Volkoff. Desde Suecia llega Eclipse, para añadir más rock duro y metalero al finde.

La pianista Irene Albar arranca hoy su tanda de tres días en el Central recordando a su maestro Barry Harris acompañada del contrabajo de Richie Ferrer y la batería de Jimmy castro. En el Galileo hoy suenan las románticas canciones de Bosko Beuk, el artista yugoslavo afincado desde hace años en el levante español. Y el domingo Colectivo Panamera echa el cierre a la semana llevando sus bailables y soleadas canciones a la feria X-MasFun que se celebra en el Matadero.