La cuidadora acusada de agredir a un menor tutelado en Segorbe será juzgada

La cuidadora investigada por un juez de Segorbe (Castellón) por la presunta agresión e insultos racistas a un menor tutelado, interno en un centro de acogida de esta localidad, irá a juicio. El Juzgado de Instrucción número 1 de la capital del Alto Palancia que investiga los hechos, ocurridos la pasada primavera, ha concluido la instrucción y ha transformado las diligencias previas en un procedimiento de delito leve de lesiones a petición de la Fiscalía, única acusación.

Según ha informado el Tribunal Super...

La cuidadora investigada por un juez de Segorbe (Castellón) por la presunta agresión e insultos racistas a un menor tutelado, interno en un centro de acogida de esta localidad, irá a juicio. El Juzgado de Instrucción número 1 de la capital del Alto Palancia que investiga los hechos, ocurridos la pasada primavera, ha concluido la instrucción y ha transformado las diligencias previas en un procedimiento de delito leve de lesiones a petición de la Fiscalía, única acusación.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), al no existir otras acusaciones, la cuidadora, que declaró como investigada por maltrato y discriminación racial, odio y xenofobia, solo puede ser juzgada por los delitos por los que le acuse el Ministerio Público.

Los hechos ocurrieron el pasado 25 de mayo en la localidad castellonense de Segorbe, en el autobús que traslada al colegio a los niños tutelados desde los centros de acogida en los que están internos. Al parecer, el menor agredido tuvo que ser atendido por una ambulancia de las lesiones sufridas.

El niño es uno de los 18 pequeños que fueron trasladados a principios de mayo a diferentes dependencias de la red de tutela de menores de la Generalitat Valenciana tras la clausura del centro de acogida La Resurrección de Segorbe, según confirmaron a EL PAÍS fuentes de la Consejería de Igualdad y Políticas Inclusivas.

El traslado de los niños por parte del departamento que dirige la consejera y vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, se debió, entre otras causas, a la existencia de una denuncia de presunto abuso sexual a una menor por un educador, que fue despedido por el centro gestionado por las Hermanas Terciarias Capuchinas. También a las duchas frías infligidas -según los informes de inspección- a algún menor acogido o al suministro de alimentos caducados. La Generalitat comunicó todas las irregularidades detectadas a la Fiscalía de Menores de Castellón.

Tras la clausura del centro, fue la Consejería de Políticas Inclusivas la que contrató a una empresa de transporte escolar para que llevara a los pequeños desde su nuevo alojamiento tutelado hasta el colegio en el que, hasta ese momento, habían recibido clase, al menos hasta que terminara el curso. Según indicaron desde el Consell, la empresa de autobuses contrató a su vez a una profesional para cuidar de los niños durante el trayecto al centro educativo. La misma que será juzgada ahora.

La acompañante escolar está investigada por un delito de maltrato y otro de discriminación racial, odio y xenofobia y tendrá que declarar próximamente, han confirmado desde el Tribunal Superior de Justicia valenciano.

El magistrado ha tomado declaración como testigos al conductor del autobús, a varios menores que viajaban junto al niño presuntamente agredido y que presenciaron los hechos y a dos agentes de la Policía Local de Segorbe que elaboraron el atestado del suceso, de cuya investigación se hizo cargo posteriormente la Guardia Civil.

Oltra ha indicado este viernes en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell que la Generalitat será parte en el procedimiento judicial al tratarse de un menor tutelado por el Gobierno valenciano.