Listos para el terraceo

Con el buen tiempo llegan las ganas de terraceo y la curiosidad por encontrar apetecibles sitios. Para los cazadores de terrazas, hay estrenos: TriCiclo se sube a la azotea de The Hat, un moderno hostal junto a la Plaza Mayor; el chef dos estrellas Ramón Freixa sale al aire en el hotel The Principal, estratégico en la Gran Vía; La Lonja ofrece degustación de pescado con vistas al palacio Real, con decoración de Ignacio García de Vinuesa, quien también firma la terraza hippy chic de El Recuerdo, cerca de Cuatro Caminos; y El Velázquez 17 surge en el barrio de Salamanca como "una pequeñ...

Con el buen tiempo llegan las ganas de terraceo y la curiosidad por encontrar apetecibles sitios. Para los cazadores de terrazas, hay estrenos: TriCiclo se sube a la azotea de The Hat, un moderno hostal junto a la Plaza Mayor; el chef dos estrellas Ramón Freixa sale al aire en el hotel The Principal, estratégico en la Gran Vía; La Lonja ofrece degustación de pescado con vistas al palacio Real, con decoración de Ignacio García de Vinuesa, quien también firma la terraza hippy chic de El Recuerdo, cerca de Cuatro Caminos; y El Velázquez 17 surge en el barrio de Salamanca como "una pequeña terraza para los que no necesitan dejarse ver". Estos dos locales ofrecen cocina non stop, del desayuno al cóctel nocturno.

En la neotaberna TriCiclo, una de las obligatorias paradas gastronómicas en el Barrio de las Letras, hay que luchar por una mesa. Ahora, a partir del 20 de mayo, admiten reservas, pero en las alturas de The Hat. Cada miércoles, 40 comensales cenarán en una mesa corrida, con vistas gatunas a los tejados. Chicharro curado con almendras o menestra marina de algas y marisco gallego son algunos de los platos del menú, a 50 euros.

En la séptima planta del hotel The Principal hay un jardín urbano desde el que se divisan emblemáticos edificios como el Círculo de Bellas Artes o Metrópolis. Freixa, que tiene su propio espacio ajardinado en su restaurante del hotel Único se encarga de Ático, el restaurante prêt à porter del Principal y de la nueva terraza. Con una carta de finger food con cremosas croquetas de buen jamón y corte crujiente de ensaladilla rusa, se puede comer y beber desde el mediodía hasta las doce de la noche (y hasta las dos de jueves a sábado).

No es nueva, pero sí lo es su reconocimiento como el hotel mejor valorado por los usuarios de Trip Advisor, la terraza recoleta y silenciosa del hotel Orfila, un palacete del siglo XIX que pertenece a la familia de lujo Relais & Châteaux. Ahora su jardín, ambientación perfecta para un té a la inglesa, es un lugar de tapeo a la española, con cinco platos y copa de vino por 35 euros.