Barreras rompe dos años de inactividad con el inicio de la construcción del ‘flotel’

Feijóo y directivos de Pemex acuden de incógnito a Ferrol para evitar protestas

Feijóo (con el dedo extendido), entre el conselleiro de Industria (izquierda), el presidente de Barreras y otros directivos.LALO R. VILLAR

El sonido de las máquinas trabajando volvió a escucharse en las viejas naves del astillero Hijos de J. Barreras de Vigo después de dos años de inactividad, aunque fuera para cortar de forma simbólica una única chapa, la primera, que habrá de formar parte del flotelcontratado por Pemex. El barco-hotel, cuya finalidad será albergar a trabajadores de plataformas petrolíferas, será el cuarto que se construya en el mundo y el segundo en Barreras, que ha visto en la llegada del capital mexicano su tabla de salvación.

Con distintas palabras confirmaron su confianza en esta nueva etapa...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El sonido de las máquinas trabajando volvió a escucharse en las viejas naves del astillero Hijos de J. Barreras de Vigo después de dos años de inactividad, aunque fuera para cortar de forma simbólica una única chapa, la primera, que habrá de formar parte del flotelcontratado por Pemex. El barco-hotel, cuya finalidad será albergar a trabajadores de plataformas petrolíferas, será el cuarto que se construya en el mundo y el segundo en Barreras, que ha visto en la llegada del capital mexicano su tabla de salvación.

Con distintas palabras confirmaron su confianza en esta nueva etapa todas las autoridades que intervinieron en el acto protocolario, desde el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, al alcalde, Abel Caballero, pasando por el presidente del astillero, José García Costas. El coordinador de asesores de Pemex, Carlos Roa, número dos de la petrolera, alimentó las expectativas de recuperación de la carga de trabajo al añadir otros tres buques a la cartera de posibles pedidos. En diciembre, en la presentación de los nuevos socios del astillero, Roa anunció la contratación de un atunero presupuestado por 20 millones de euros y negociaciones muy avanzadas para cerrar la construcción de otros cuatro barcos en los próximos meses. Se trata de un abastecedor valorado en 85 millones y tres buques-tanque que engrosarán la flota menor de Pemex. El abanico de posibles contratos se abre con un principio de acuerdo con una empresa mexicana para optar a la construcción de tres barcos denominados estimuladores de pozos de petróleo. Técnicos de esa empresa mexicana, de la que Roa no quiso desvelar el nombre, acordaron tras una reciente visita a Barreras la elección del astillero vigués. Pero previamente deben “concursar y ganar, y ahora la probabilidad es baja”, admitió el directivo de Pemex. La decisión se conocerá en mayo o junio y el precio de los contratos rondaría los 70 millones de dólares por buque.

El flotel del que se cortó la primera chapa será un barco de 131 metros de eslora y con capacidad para casi 700 personas. El plazo de construcción será de 29 meses contados a partir de marzo o abril, cuando se inicie el trabajo. Entre tanto, y a falta de la firma de los acuerdos definitivos de Pemex con Barreras y Navantia, el próximo 17 de febrero, la directiva del astillero estudia la posibilidad de que la obra se acoja al sistema de bonificaciones fiscales del nuevo tax lease. “Parece que va a funcionar bien y nos puede ayudar a ahorrar unos centavos”, afirmó Roa.

Feijóo, considerado uno de los artífices del acuerdo accionarial con Pemex, destacó la “capacidad y calidad” del trabajo de Barreras y la “gran oportunidad” que supone la nueva etapa del astillero vigués. Antes de acudir a Vigo, el presidente también regresó a Ferrol, tras muchos meses esquivándola en la agenda oficial, con los directivos de Pemex para ultimar los detalles de la construcción del flotel en Navantia, informa Lorena Bustabad. Para Feijóo, Ferrol “es sinónimo de barcos”. Incluso tiró de chascarrillo para comentar que el Arca de Noé se construyó en la ría. “Es una oportunidad para Ferrol”, proclamó, en una comarca asfixiada por el paro y con un único contrato en ciernes que sólo generará ocupación para la cuarta parte de la plantilla directa, calcula el comité de Navantia, molesto porque no fue informado de una visita muy tempranera que se anunció con apenas una hora de antelación para esquivar posible protestas. Contra la visita “secreta” arremetieron también BNG e IU, que la calificaron de “indigno secretismo institucional” y “pasarela de propaganda”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En