MERCÈ 2013

Dinamita en la plaza de Catalunya

El grupo barcelonés The Excitements arrolla con soul y rhythm and blues

Menos público la noche del lunes en la plaza de Catalunya que en las tres jornadas anteriores en los conciertos de Mercè de Barcelona. Probablemente, cuatro días de fiesta seguidos son mucha fiesta y el cartel tampoco era, a priori, de los que atraen multitudes. Error, porque si Los Fulanos cumplieron sin más, la propuesta de The Excitements es de las que, sin duda, debería reunir multitudes.

El combo barcelonés Los Fulanos anda empeñado en resucitar el viejo bugalú (mezcla de salsa y soul); la idea es respetable pero los resultados escénicos son repetitivos y, como mínimo el lunes en l...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Menos público la noche del lunes en la plaza de Catalunya que en las tres jornadas anteriores en los conciertos de Mercè de Barcelona. Probablemente, cuatro días de fiesta seguidos son mucha fiesta y el cartel tampoco era, a priori, de los que atraen multitudes. Error, porque si Los Fulanos cumplieron sin más, la propuesta de The Excitements es de las que, sin duda, debería reunir multitudes.

El combo barcelonés Los Fulanos anda empeñado en resucitar el viejo bugalú (mezcla de salsa y soul); la idea es respetable pero los resultados escénicos son repetitivos y, como mínimo el lunes en la plaza de Catalunya, algo estridentes. Para bailar, sin más, mientras el público se paseaba por la plaza.

Todos los barceloneses que no estaban a esa hora en la plaza de Catalunya sin duda se agolpaban ante las escalinatas de la catedral que registraron un llenazo absoluto. Y lo más interesante es que los apretujados asistentes no estaban allí para venerar a ninguna estrella pop sino para escuchar a la Orquestra Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya con un repertorio típico de nuestros despertares televisivos en las mañanas de Año Nuevo. El joven director madrileño Andrés Salado dirigió un programa de valses y polcas de la familia Strauss (en realidad de Johann hijo, solo uno de su hermano Josef) y el público siguió el evento con verdadera devoción.

Sobre las 23 horas con solo pasearse unos metros los aromas del feliz Danubio se transformaban en los de un Ebro más reivindicativo. En la plaza de Sant Jaume, Quico el Célio, el Noi i el Mut de Ferreries celebraban sus 20 años de permanencia en los escenarios. El buen humor (y bastante mala leche) de los Quicos se contagió de inmediato a la numerosa audiencia...

Pero la verdadera sorpresa de la noche apareció media hora más tarde en el escenario de la plaza de Catalunya: The Excitements. El grupo barcelonés centra su trabajo en el soul y el rhythm and blues más arrolladores y lo hace con una solvencia contagiosa que se torna pura dinamita cuando su cantante, la mozambiqueña Koko-Jean Davis, toma las riendas. Los Excitements dinamitaron la plaza de Catalunya con una de esas músicas eternas que cada día suenan más actuales. La banda demostró en la Mercè que puede dar mucho y que merecen bastante más. Los que allí estaban bailando (bailaba todo el mundo) seguro que no los van a olvidar.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En