Los afectados por lipoatrofia ascienden a 12 en una guardería del Eixample
Los padres de familia alegan que hay cuatro afectados más
Aumenta el número de casos de lipoatrofia semicircular en la guardería municipal de El Roure, en el Eixample. El Ayuntamiento de Barcelona confirmó ayer que ya son al menos 12 los afectados, 10 menores y 2 profesores. El pasado 16 de abril, el regidor de Educación y del distrito, Gerard Ardanuy (CiU) había ordenado el cierre “provisional y preventivo” del centro, tras el diagnóstico del mal en cuatro personas.
El Consistorio no confirmó la situación de otras cuatro maestras, aunque según los padres de ...
Aumenta el número de casos de lipoatrofia semicircular en la guardería municipal de El Roure, en el Eixample. El Ayuntamiento de Barcelona confirmó ayer que ya son al menos 12 los afectados, 10 menores y 2 profesores. El pasado 16 de abril, el regidor de Educación y del distrito, Gerard Ardanuy (CiU) había ordenado el cierre “provisional y preventivo” del centro, tras el diagnóstico del mal en cuatro personas.
El Consistorio no confirmó la situación de otras cuatro maestras, aunque según los padres de familia del centro también tienen la enfermedad. La guardería comparte edificio con la biblioteca Agustí Centelles, que cerró sus puertas a finales de 2012 tras el diagnóstico de tres casos del mal, que es reversible y afecta el tejido adiposo de brazos y piernas. Es indolora pero deja semicírculos hundidos en los brazos.
La finca también alberga un centro cívico y una ludoteca, que de momento permanecerán abiertas al público. Desde el pasado abril, las 87 familias que llevaban a sus niños a El Roure han sido trasladadas a otros centros. En su día, Ardanuy explicó que el análisis que se realizó a la biblioteca descartó afectaciones a la guardería. Tras el cierre, se realizaron pruebas a todos los docentes y alumnos.
Los padres de familia sopesan emprender acciones legales pues consideran que hubo negligencia. Asi mismo solicitan que se revise a los niños que atendieron el centro en el curso 2011 y 2012. La literatura médica atribuye la lipoatrofia semicircular a la deficiente climatización —poca humedad— y a los campos electromagnéticos que se crean sobre todo en las nuevas oficinas.