Reencuentro con la vida

¿Existe por ventura un asunto humano que tanto comprometa como el amor, que involucre, que arrastre, que duela tanto? Probablemente, no; porque Amor —sin artículo, como lo denominaban en el Siglo de Oro— es expresión suprema del añorado reencuentro del ser humano con la Naturaleza de la cual el frenesí de la vida cotidiana, hoy, nos distancia tanto.

Con tal certeza, más la convicción de que a nadie cabe el sustraerse del influjo de tan grande talismán, José Montero Padilla ha escrito un cogollo de frescos relatos titulado Del amor y sus catástrofes,con Madrid como telón de fond...

¿Existe por ventura un asunto humano que tanto comprometa como el amor, que involucre, que arrastre, que duela tanto? Probablemente, no; porque Amor —sin artículo, como lo denominaban en el Siglo de Oro— es expresión suprema del añorado reencuentro del ser humano con la Naturaleza de la cual el frenesí de la vida cotidiana, hoy, nos distancia tanto.

Con tal certeza, más la convicción de que a nadie cabe el sustraerse del influjo de tan grande talismán, José Montero Padilla ha escrito un cogollo de frescos relatos titulado Del amor y sus catástrofes,con Madrid como telón de fondo. Navegando por su universo, el autor descubre la estela dejada por la senda amatoria, ora grandiosa, ora terrible, emprendida por poetas, narradores y dramaturgos entre los que figuran Quevedo, Cadalso, Larra, Machado, Nervo, Neruda, Juan Ramón, Jardiel, Alfonsina Storni, Salinas o De Penagos, relacionados con el amor de manera sublime por —o pese a— su vulnerabilidad a tan poderoso hechizo.

Describe sus afanes, miedos y victorias con copioso arsenal de vivencias y anécdotas que pueden permitir al lector o lectora orientarse en un arte del cual nadie les instruye. Catedrático de Literatura, Montero Padilla desgrana sus amores con tiento y desenvoltura. Tiento, porque el amor es asunto demasiado frágil como para eludir el riesgo de quebrarlo; y desenvoltura, porque se percibe que el autor siente hondamente cuanto escribe.

Surgen pues ante la mirada Lisi, el amor quevediano; Dolores Armijo, musa de Larra; Leonor Izquierdo y Pilar de Valderrama —la idolatrada Guiomar de don Antonio— o aquella escultora, Margarita, quien al verse no correspondida en su loco amor por Juan Ramón se quitó la vida a los 19 años… Por las páginas de este libro —llenas del saber de quien mucho ha amado—, la Literatura se trenza con la vida de manera gozosa y fértil, ya que todo el que haya estado enamorado una vez "nunca ya podrá decir que está solo", como escribió el poeta persa Omar Khayham.

Del amor y sus catástrofes. Algunas historias verdaderas. Por José Montero Padilla. Ilustraciones de Xavier Magalhaes. 133 páginas Editorial Huerga y Fierro. Madrid. 15 euros.