Opinión

28-F: Un rojo más intenso

Hoy, de nuevo, los andaluces ocuparán las calles. Porque aunque el 28 de febrero de 1980 se ganó la batalla por la autonomía, está otra vez amenazada

El disparo sonó seco. El joven cayó mortalmente herido. “Un charco de sangre en forma de rosa avanza hasta caer al asfalto”, escribió un periodista. La acera de la calle Comandante Benítez de Málaga quedó teñida de rojo.

Era el 4 de diciembre de 1977. José Manuel García Caparros, un joven de 19 años, militante de CC OO, perdía la vida por Andalucía. A pocos metros de donde cayó asesinado por las balas de un policía que nunca fue identificado, estaban algunas personas que con el tiempo jugaron un papel importante en la comunidad.

El periodista era Juan de Dios Mellado, hoy editor....

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El disparo sonó seco. El joven cayó mortalmente herido. “Un charco de sangre en forma de rosa avanza hasta caer al asfalto”, escribió un periodista. La acera de la calle Comandante Benítez de Málaga quedó teñida de rojo.

Era el 4 de diciembre de 1977. José Manuel García Caparros, un joven de 19 años, militante de CC OO, perdía la vida por Andalucía. A pocos metros de donde cayó asesinado por las balas de un policía que nunca fue identificado, estaban algunas personas que con el tiempo jugaron un papel importante en la comunidad.

El periodista era Juan de Dios Mellado, hoy editor. Acompañaba a un grupo de políticos, entre los que estaban el actual alcalde de Málaga, entonces diputado de UCD, Francisco de la Torre, y el diputado socialista Francisco Román. Ese día, millón y medo de andaluces se echó a la calle en todas las capitales para pedir autonomía.

Han pasado 35 años. Hoy, Caparrós será nombrado hijo predilecto de Andalucía. Hoy, de nuevo, los andaluces ocuparán las calles. Porque aunque el 28 de febrero de 1980 se ganó la batalla por la autonomía, está otra vez amenazada.

El peligro llega de los mismos sectores que entonces se oponían al autogobierno: la derecha. Las políticas neoconservadoras, unas impuestas por el eje Berlin-Bruselas, y otras de rancia raíz autóctona, están produciendo un gravísimo daño al Estado del bienestar. El austericidio ha extendido más paro y más pobreza entre las clases trabajadoras. Se mutilan derechos laborales y se deteriora la sanidad, la educación.

Por ello, la plataforma Compromiso Social para el Progreso de Andalucía, integrada por casi 30 organizaciones, ha convocado a los andaluces. Bajo el lema Tierra y libertad, los más diversos colectivos, sindicalistas, vecinos, consumidores, discapacitados, periodistas, mujeres, padres, policías, guardias civiles, sanitarios, feministas, mayores… ocuparán de nuevo las calles.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Hoy no habrá policías emboscados que disparan a inocentes, como hace 35 años. Hoy los disparos figurados llegan desde los despachos del poder, desde “las diferentes derechas, ya sean nacionalistas o recentralizadoras”, que pretenden frenar el autogobierno, apunta un manifiesto de la plataforma.

Hoy se sale a la calle para defender el modelo social que tanto sudor, y alguna sangre, ha costado. Para defender los servicios públicos. Para promover el empleo, la cohesión social, la igualdad de oportunidades. Para que la brecha entre ricos y pobres no siga aumentando. Para que la distancia entre comunidades no siga creciendo. No queremos volver al XIX.

Lo ha resumido en pocas palabras el líder de Izquierda Unida (y vicepresidente de la Junta) Diego Valderas: “Nos quieren robar lo que hemos conquistado”.

Por vez primera, el PSOE secunda la convocatoria. Por vez primera, dirigentes del partido que lleva gobernando esta tierra desde hace más de tres décadas se mezclarán con los ciudadanos de a pie. No podían quedar al margen.

Como si queda, una vez más, la derecha. Los dirigentes del PP censuran que los socialistas vayan detrás de la pancarta. “El PSOE se ha sumado a la posición de radicalidad de Izquierda Unida”, acusa el portavoz del PP Carlos Rojas.

No entienden nada. Como en 1980, se quedarán fuera de juego. No ha pasado un año desde su victoria electoral en la comunidad, y ya son superados por los socialistas, que parecían moribundos. Lo atestiguan las últimas encuestas (EGOPA, CEPES).

Este 28-F tiene pues un carácter extraordinario. Más reivindicativo que festivo. Más de calle y menos de salón y canapés. Como ha dicho el portavoz socialista en el Parlamento, hoy será un 28-F “con un color rojo más intenso”.

Como la sangre de Caparrós. Aquella de la que escribió Juan de Dios Mellado. Por cierto: ¿para cuándo su medalla de Andalucía?

@JRomanOrozco

Archivado En