La elección de Sánchez, un revés para Castedo

La nueva consejera de Bienestar Social se distanció de la alcaldesa de Alicante tras el 'caso Brugal'

La alcaldesa de Alicante, Sonia CastedoReuters

El 26 de junio de 2008 el ex alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, llamaba al constructor Enrique Ortiz, según el informe policial del caso Brugal. Quería celebrar con una fiesta en el yate de Ortiz que el Tribunal Supremo hubiera archivado el caso de los aparcamientos, en el que ambos estaban imputados con la actual alcaldesa Sonia Castedo. Irían concejales, le dijo Alperi a Ortiz, “solo los de confianza: Sonia (Castedo), Sonia (Alegría), Marta (García Romeu)...”. Citó varios nombres más hasta llegar al de Suni, a la que dudaba si invitar o no.

Suni, el apelativo cariñoso de ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El 26 de junio de 2008 el ex alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, llamaba al constructor Enrique Ortiz, según el informe policial del caso Brugal. Quería celebrar con una fiesta en el yate de Ortiz que el Tribunal Supremo hubiera archivado el caso de los aparcamientos, en el que ambos estaban imputados con la actual alcaldesa Sonia Castedo. Irían concejales, le dijo Alperi a Ortiz, “solo los de confianza: Sonia (Castedo), Sonia (Alegría), Marta (García Romeu)...”. Citó varios nombres más hasta llegar al de Suni, a la que dudaba si invitar o no.

Suni, el apelativo cariñoso de Asunción Sánchez Zaplana, no formaba ya parte del círculo de confianza. El jueves pasado recibió una llamada de Alberto Fabra para comunicarle que contaba con ella como consejera de Justicia y Bienestar Social, todo un revés para la alcaldesa Castedo, de quien Sánchez Zaplana se ha distanciado desde la eclosión del caso Brugal. De hecho, fue una de las ediles que no apoyó públicamente a Castedo a las puertas del Tribunal Superior de Justicia el primer día que la alcaldesa declaró ante el juez.

“Quien diga eso, miente. Absolutamente”, sostiene Castedo, asegurando que hace días que sabía del nombramiento de su compañera de gobierno y que hasta se han ido de vacaciones juntas este verano. Sin embargo, en el consistorio alicantino, una fuente cercana a Sánchez Zaplana reconoce que la opción de la alcaldesa al elaborar las listas municipales era dejar fuera a la hoy apuntada como consejera “pese a ser toda la vida del PP”. Y continúa: “Suni quizás coincidiera de vacaciones con Castedo, pero extraña. Si tiene 10 días se va con los scouts o acoge un saharaui”.

Tras 14 años dirigiendo Acción Social, Sánchez Zaplana deja una deuda de 422.000 euros a la asociación de enfermos mentales Afema, pero tanto colectivos sociales como oposición coinciden en los adjetivos: “Dialogante”, “sensata”, “trabajadora”, etc.

De derechas, con experiencia de voluntariado cristiano, Sánchez Zaplana es vista como un verso libre dentro del PP en materia social, “nada que ver con Jorge Cabré (el cargo saliente)”. Tan libre que hasta Esquerra Unida pidió en un pleno a Castedo que dimitiera por su involucración en el caso Brugal y le cediera el puesto a Sánchez Zaplana: “Fabra se ha llevado a la única mujer que podía hacerle sombre a Castedo de cara a un relevo en la alcaldía”, remata el edil en la oposición Miguel Pavón.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En