El 86% de los locales de compra de oro incumple la normativa

El 86% de los establecimientos de compra de oro y casas de empeño cometen irregularidades, según las conclusiones de una campaña de inspección realizada por el Instituto Galego de Consumo. Los datos del organismo, dependiente de la Xunta, reflejan que el 57% de estos locales, 100 en total, trabajan con básculas que “no son aptas para transacciones comerciales” porque carecen de las etiquetas —la marca comunitaria y la metrológica M Verde— que garantizan que su funcionamiento es correcto. Los inspectores de la Xunta visitaron 174 establecimientos de compraventa —en Galicia hay 242— y encontraro...

El 86% de los establecimientos de compra de oro y casas de empeño cometen irregularidades, según las conclusiones de una campaña de inspección realizada por el Instituto Galego de Consumo. Los datos del organismo, dependiente de la Xunta, reflejan que el 57% de estos locales, 100 en total, trabajan con básculas que “no son aptas para transacciones comerciales” porque carecen de las etiquetas —la marca comunitaria y la metrológica M Verde— que garantizan que su funcionamiento es correcto. Los inspectores de la Xunta visitaron 174 establecimientos de compraventa —en Galicia hay 242— y encontraron infracciones de la normativa en 149 de ellos. Tras una primera campaña de advertencia, Consumo ha iniciado una segunda fase para comprobar si los propietarios han corregido las infracciones. “Se está constatando una importante reducción de las infracciones”, avanzó la presidenta del instituto, Nava Castro.

La infracción más habitual consiste en no colocar en un lugar visible los precios de compra del metal precios por gramo, algo que se repite en 137 (un 78,7%) de los establecimientos visitados. Además, en 35% de los comercios no entregan al vendedor el correspondiente resguardo de compra, el 22% carece de hojas de reclamaciones oficiales y en el 25,2% falta el cartel para anunciar que existen estas hojas. En 64 de los establecimientos tampoco había un libro de registro en el que anotar las compras o no tenían sus hojas numeradas y selladas por la Jefatura Superior de Policía, como obliga la ley para este tipo de transacciones. Algunos tampoco cumplían con la obligación de conservar durante 15 días las piezas de metales preciosos. El Instituto de Consumo trasladó a la policía nacional y a la Guardia Civil estas infracciones.

A pesar del alto porcentaje de incumplimientos detectados, las quejas ante Consumo son “pocas”, según explicó Castro, ya que en la mayoría de los casos los vendedores no quieren revelar su identidad. “No hay muchas quejas, de ahí nuestra campaña de oficio para salvaguardar al consumidor”, apuntó Castro. Las sanciones por infracciones leves llegan hasta los 3.000 euros y las graves hasta los 15.000 euros.