Condenado el dueño de la academia Brighton a tres años de cárcel
El Banco Pastor deberá indemnizar a los alumnos de la escuela de idiomas que cerró en 2002
La Audiencia de Barcelona ha condenado a Banco Pastor Servicios Financieros, como responsable civil, a indemnizar a los alumnos perjudicados por el cierre en 2002 de las academias Brighton, en las cantidades que desembolsaron a la entidad para recibir cursos de idiomas que no les fueron impartidos.
En la sentencia, dictada por la sección quinta de la Audiencia, se condena al dueño de las academias, Alfredo Ibáñez, a la pena de tres años de prisión, que había aceptado al inicio del juicio, el p...
La Audiencia de Barcelona ha condenado a Banco Pastor Servicios Financieros, como responsable civil, a indemnizar a los alumnos perjudicados por el cierre en 2002 de las academias Brighton, en las cantidades que desembolsaron a la entidad para recibir cursos de idiomas que no les fueron impartidos.
En la sentencia, dictada por la sección quinta de la Audiencia, se condena al dueño de las academias, Alfredo Ibáñez, a la pena de tres años de prisión, que había aceptado al inicio del juicio, el pasado mes de febrero, por el delito de estafa continuada. También le condena a indemnizar a los alumnos perjudicados por el cierre, que ya habían pagado los cursos por adelantado o habían suscrito contratos de financiación con cinco entidades bancarias y que finalmente no recibieron las clases.
La Audiencia condena como "responsable civil, directo y solidario con el acusado" a Banco Pastor Servicios Financieros a indemnizar a los alumnos, algunos de los cuales pagaron más de 2.000 euros, por las sumas que les abonaron más los intereses legales generados desde el 28 de octubre de 2002. El Banco Pastor fue la única entidad que se negó a aceptar un pacto con el ministerio público, al que sí se acogieron otras cuatro entidades bancarias involucradas en el procedimiento y que consignaron el dinero que se les reclamaba en el proceso penal.
La sentencia todavía no es firme porque cabe contra ella la presentación de un recurso de casación en el plazo de cinco días, por lo que los pagos a las personas afectadas no se efectuarán hasta que el fallo adquiera firmeza y en cualquier caso no antes del mes de septiembre, según advierte en una nota el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.
El caso de las academias de idiomas Brighton llegó a juicio en el año 2008, pero un olvido judicial obligó a devolverlo a instrucción porque casi 1.400 perjudicados se habían quedado fuera de proceso.