Frigorífics Garrotxa cierra y deja sin empleo a un centenar de trabajadores

La dirección de Frigorífics Garrotxa ha presentado hoy a los trabajadores el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción de contratos, previo al cierre de esta empresa cárnica de Sant Esteve d'en Bas (Girona), que supondrá la pérdida de un centenar de empleos. Empresa y trabajadores se han reunido hoy para negociar las condiciones del cierre por problemas de liquidez de esta empresa cárnica, que atraviesa dificultades derivadas del encarecimiento del precio de los productos y de organización.

El responsable de Industria Agroalimentaria del sindicato UGT, Gabriel Tejada, ha exp...

La dirección de Frigorífics Garrotxa ha presentado hoy a los trabajadores el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción de contratos, previo al cierre de esta empresa cárnica de Sant Esteve d'en Bas (Girona), que supondrá la pérdida de un centenar de empleos. Empresa y trabajadores se han reunido hoy para negociar las condiciones del cierre por problemas de liquidez de esta empresa cárnica, que atraviesa dificultades derivadas del encarecimiento del precio de los productos y de organización.

El responsable de Industria Agroalimentaria del sindicato UGT, Gabriel Tejada, ha explicado que se ha mantenido una "primera reunión del proceso que ha presentado la empresa de extinción de trabajo" y que "solamente se ha hablado del tema de las causas, ver un poco los motivos y como se podía organizar la negociación". "Por el momento van a dar algunas vacaciones, algún día de permiso mientras seguimos negociando", ha indicado Tejada, tras lo que ha añadido que se dispone de un plazo de un mes para cerrar las conversaciones.

Según los responsables de la empresa, a pesar de que los trabajadores han cobrado siempre con normalidad, se acumulaban dos años de pérdidas debido al precio del cerdo y al descenso en el consumo de esta carne a favor de otros animales más económicos. Frigorífics Garrotxa, que tiene tres centros de trabajo en Barcelona, Figueres (Girona) y Sant Esteve d'en Bas, ha optado por el cierre antes de llegar a una situación más grave.

Entre la plantilla de Sant Esteve d'en Bas, la más numerosa con unas noventa personas, hay un numeroso grupo inmigrantes, así como integrantes de una misma familia y empleados con más de veinte años de antigüedad en la planta. Desde el Ayuntamiento se ha indicado que se intentará hacer todo lo posible para atraer nuevas empresas de cualquier sector al municipio.