El fiscal de Álava pide la recusación de los tres magistrados del ‘caso Tellería’
Señala que podrían no ser imparciales al haber tratado antes el espionaje
El fiscal jefe de Álava, Josu Izaguirre, ha presentado un escrito de recusación de los tres magistrados que componen la sala de lo penal de la Audiencia Provincial de Álava para que sea otra sala la que enjuicie el conocido como caso Tellería, la supuesta trama de espionaje a personalidades alavesas vinculada al exdirigente del PNV Aitor Tellería y dos ertzainas. Izaguirre presentó el escrito el pasado jueves alegando que los tres magistrados —Jesús Medrano, Jesús Poncela (ponente) y Jaime Tapi...
El fiscal jefe de Álava, Josu Izaguirre, ha presentado un escrito de recusación de los tres magistrados que componen la sala de lo penal de la Audiencia Provincial de Álava para que sea otra sala la que enjuicie el conocido como caso Tellería, la supuesta trama de espionaje a personalidades alavesas vinculada al exdirigente del PNV Aitor Tellería y dos ertzainas. Izaguirre presentó el escrito el pasado jueves alegando que los tres magistrados —Jesús Medrano, Jesús Poncela (ponente) y Jaime Tapia— podrían estar contaminados por haber dilucidado anteriormente sobre el objeto de la causa. La misma sala retiró en junio del año pasado la imputación más grave que les imputó el juez instructor del caso, Roberto Ramos, la relacionada con el descubrimiento y la revelación de secretos, y mantuvo la de infidelidad en la custodia de documentos y violación de secretos, rebajando notablemente las penas máximas a las que los imputados se enfrentaban. Esta causa —por la que la Fiscalía ha pedido cuatro años de cárcel para Tellería y los dos ertzainas de la antigua Unidad de Información y Análisis en materia Antiterrorista y 342.000 euros de indemnización— es la que estaba pendiente de ser juzgada por la sala que ahora el fiscal pide recusar. La Audiencia también trató la demanda de las defensas contra ocho periodistas por revelación de secretos. Según Izaguirre, al haber entrado al fondo de esta cuestión cabría la posibilidad de que los magistrados incurran en una falta de imparcialidad.
La recusación retrasaría el inicio del juicio unas pocas semanas, ya que ahora se ha abierto un plazo de tres días para escuchar las alegaciones de las partes implicadas, tras lo cual los tres magistrados deberán elaborar un informe señalando si aceptan o no la recusación. Después, una sala del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, en la que participa su presidente, Juan Luis Ibarra, tendrá que tomar la decisión final, lo que ocurrirá aproximadamente en junio.