Agirre cierra la pugna, pero admite carecer de la dirección deseada

Gerenabarrea "asume, admite y aplaude" su revelo al frente del PNV alavés

El nuevo presidente del PNV en Álava, Xabier Agirre, lanzó ayer un guiño al entendimiento interno al dar por concluida “la pugna y la competición” tras la asamblea territorial del sábado. Según consideró, el objetivo ahora es “conformar un equipo”. “Todos somos necesarios y debemos seguir construyendo un territorio abertzale y democrático”, manifestó, durante una entrevista en ETB.

El recién elegido líder territorial trató de minimizar así la polémica suscitada con la elección de su ejecutiva, en la que nueve de los 14 miembros forman parte del sector afín al que era su único r...

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El nuevo presidente del PNV en Álava, Xabier Agirre, lanzó ayer un guiño al entendimiento interno al dar por concluida “la pugna y la competición” tras la asamblea territorial del sábado. Según consideró, el objetivo ahora es “conformar un equipo”. “Todos somos necesarios y debemos seguir construyendo un territorio abertzale y democrático”, manifestó, durante una entrevista en ETB.

El recién elegido líder territorial trató de minimizar así la polémica suscitada con la elección de su ejecutiva, en la que nueve de los 14 miembros forman parte del sector afín al que era su único rival, Iñaki Gerenabarrena. Agirre reconoció que “no es” la dirección que le hubiera gustado tener para afrontar su gestión, aunque matizó que responde a un sistema electoral interno que es “absolutamente democrático” y cuyos resultados, en ocasiones, “impiden tener un equipo bien conformado”.

El presidente alavés del PNV, no obstante, se refirió a la posible impugnación de la asamblea territorial al reconocer el derecho que a recurrir tienen “quienes se sintieron agraviados con el resultado”. “Algún apoderado planteó que algo había pasado, porque no se correspondió la primera votación con las actas que traían todas y cada una de las organizaciones municipales”, indicó. No obstante, avanzó su intención de mantenerse “al margen” de la polémica.

No fue Agirre el único protagonista ayer en los medios de comunicación. También habló Gerenabarrena, quien abogó igualmente por la unidad interna. Según recalcó en Radio Vitoria, el proceso para elegir al líder territorial no ha supuesto “una lucha de gallos”, sino la confrontación de “dos formas de entender cómo gestionar el partido”. “La afiliación ha decidido, en un proceso absolutamente limpio y democrático, que el presidente debe ser Xabier Agirre, algo que asumo, admito y aplaudo”, señaló.

El expresidente del PNV en Álava, y único rival de Agirre en el recién acabado proceso de elección, aseguró que los nueve miembros de la nueva ejecutiva territorial que formaban parte de su candidatura fueron elegidos con la mayoría absoluta requerida y ejercerán como unos “magníficos hombres de partido”. “Todos vamos a apoyar lo que haga el partido y lo que decidan sus órganos democráticamente elegidos”, garantizó.

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