La fiesta de los videojuegos de 2023 continúa en 2024
En los primeros meses del año recibiremos algunas obras que competirán con la extraordinaria temporada pasada
Si 2023 fue un año magnífico para los videojuegos, 2024 amaga con seguirle los pasos, al menos en la primera parte del año. Tiempo habrá para ver si esta inercia se prolonga durante todo el año, si la temporada termina flojeando, si alguna sorpresa da la campana o si alguno de los juegos más esperados termina en fiasco, lo cierto es que, hoy por hoy, este primer trimestre de 2024 que acabamos de inaugurar cuenta con al menos cuatro juegos a los que conviene, y mucho, seguirles la pista....
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Si 2023 fue un año magnífico para los videojuegos, 2024 amaga con seguirle los pasos, al menos en la primera parte del año. Tiempo habrá para ver si esta inercia se prolonga durante todo el año, si la temporada termina flojeando, si alguna sorpresa da la campana o si alguno de los juegos más esperados termina en fiasco, lo cierto es que, hoy por hoy, este primer trimestre de 2024 que acabamos de inaugurar cuenta con al menos cuatro juegos a los que conviene, y mucho, seguirles la pista.
Persona 3 Reload (2 febrero): Este juego no sería tan esperado si no fuera por el fenómeno que supuso en 2016 Persona 5. Pero es que aquel juego, una obra maestra absoluta, supuso un golpe sobre la mesa en cuanto a estilo visual, historia, manejo del tiempo y el calendario, combates y mezcla del mundo ordinario (el instituto, el barrio japonés) y el mundo inconsciente (los palacios mentales). Persona 3 vuelve en forma de remake del juego de 2006, sí, pero absorbiendo todo lo que hizo bueno a Persona 5. Si la cosa sale bien, estaremos ante un juego monumental.
Final Fantasy VII Rebirth (29 febrero): Si en 2020 recibimos la primera parte del remake del famosísimo Final Fantasy VII (que en realidad se convirtió en un reboot por el giro que hacía sobre la historia original), ahora llega la segunda parte: la secuela de un remake-reboot, algo poco visto incluso en tiempos donde esos conceptos colonizan la cultura popular. Si la primera parte nos situaba en el contenido del primero de los CD del juego primigenio (la ciudad de Midgard), ahora nuestro grupo de héroes eco-terroristas salen al gran mundo. El año pasado Final Fantasy XVI decepcionó a los fans; ahora la saga tiene una nueva (¿la última?) oportunidad para enmendar sus errores y ofrecer un gran juego.
Alone in the Dark (20 marzo): Sí, un remake. Esta vez de terror; esta vez de uno de los juegos que establecieron las bases de un género que se ha convertido en uno de los favoritos de los gamers. No es para menos. En aquel ya lejano 1992, Alone in the Dark supuso un salto cuántico en las aventuras de miedo, con una historia, una ambientación y una jugabilidad difíciles de soñar en aquel entonces. El terror ha dado algunos de los más preciosos frutos recientes de todo el ecosistema digital, por lo que el listón está alto. Sin embargo, confiamos.
Dragon’s Dogma 2 (22 marzo): Otra secuela, pero ya hemos dicho muchas veces que en el mundo de los videojuegos las secuelas, precuelas o remakes no significan tanto (como en el cine o la literatura) pereza creativa como refinamiento de una fórmula jugable. El original data de 2012 y, a pesar de ser un juegazo, las limitaciones técnicas lastraron la experiencia de un mundo de fantasía oscura bruto, pesado y amenazante. Desde entonces Capcom ha tenido éxitos incontestables de crítica y público y se ha convertido en una compañía que es difícil que falle. Una apuesta segura para ser uno de los juegos del año.
Puedes seguir a BABELIA en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.