Milei pierde a su principal candidato a diputado por sus vínculos con un empresario preso por narcotráfico
José Luis Espert se baja de las elecciones legislativas del 26 de octubre tras una semana de acumulación de pruebas en su contra
Javier Milei ha perdido este domingo a su candidato a diputado en la provincia de Buenos Aires, el principal distrito electoral de Argentina y bastión del peronismo. José Luis Espert ha presentado su renuncia al presidente, acorralado por denuncias que lo vinculan a un empresario preso por narcotráfico. La muerte política de Espert ha sido una novela por entregas de siete días que termina a tres semanas de las elecciones legislativas del 26 de octubre.
“Esta es una operación claramente orquestada por un sistema que destruyó a la Argentina por décadas y sostenido por un despiadado juicio mediático hacia mi persona, al que no me seguiré prestando”, escribió Espert en sus redes sociales para justificar su renuncia. Su argumento es que las denuncias en su contra fueron una invención del peronismo kirchnerista, que desempolvó una vieja causa judicial que lo vinculaba al empresario Federico Fred Machado, hoy preso y a la espera de una extradición a Estados Unidos por narcotráfico. Milei fue en la misma línea: “El proceso de cambio profundo que estamos llevando adelante es lo único que importa. No vamos a permitir que una operación maliciosa lo ponga en riesgo”.
Espert, un economista ultraliberal de 63 años, es un viejo conocido de la política argentina. En 2019 intentó ser presidente, pero sacó menos del 2% de los votos. Fue en aquellos tiempos que se vinculó con Machado. El empresario puso a disposición uno de sus aviones privados para trasladar al candidato durante la campaña. Cuando en 2021 Machado cayó preso por narcotráfico, Espert dijo que apenas lo conocía de un encuentro fugaz. La investigación en un juzgado de Texas contra el empresario siguió su curso. El domingo pasado, el dirigente peronista Juan Grabois, y también candidato a diputado, reveló que en la justicia de Estados Unidos obraba el comprobante de una transferencia de 200.000 dólares de Machado a Espert y se inició la crisis.
El candidato achacó la filtración al kirchnerismo. Milei la consideró un “chimento de peluquería”. Pero no todos en el Gobierno quedaron conformes y pidieron a Espert una defensa más efectiva. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, candidata a senadora por la ciudad de Buenos Aires, fue la más dura. Su bandera es la lucha contra el narco y temió que las sospechas sobre su compañero de campaña terminaran por quitarle votos. Obligado y poco convencido, Espert dio una entrevista el miércoles por la noche en la que se negó diez veces a responder por sí o por no a la pregunta de si había recibido dinero sucio.
El jueves, el diario La Nación publicó un registro del Bank of América que daba cuenta de la transferencia de dinero. Esa misma noche, Espert reconoció, finalmente, que había recibido un pago de Machado, pero lo atribuyó a un trabajo de asesoría para una minera propiedad del empresario argentino en Guatemala. Agregó, por supuesto, que en aquel entonces no sabía que su mecenas era narcotraficante. Pero la presión dentro de la ultraderecha por bajarlo de la boleta en Buenos Aires no amainó.
El viernes, Espert se reunió con Milei y todo indicaba que renunciaría a su candidatura. “No me bajo nada”, fue la respuesta del candidato, para estupor de los ministros que pedían su cabeza para evitar una masacre electoral. Milei había decidido respaldarlo con tal de no mostrarse derrotado ante el kirchnerismo. Este domingo, finalmente, tuvo que ceder.
La ultraderecha tiene ahora tres semanas para recuperarse del desastre. El relevo de Espert en la papeleta no será la candidata que lo seguía en segundo lugar, Karen Reichardt, una actriz que tuvo cierta fama en el cine de comedia en los años noventa sin experiencia política alguna. Milei pidió personalmente que Reichardt tuviese un sitio destacado como candidata de la Libertad Avanza porque adora el programa sobre cuidado de mascotas que conduce en la televisión pública.
La magnitud de crisis política dio paso finalmente al pragmatismo y Reichardt cederá su lugar al tercero en la lista, Diego Santilli, un referente de Mauricio Macri que fue clave en las negociaciones para una alianza en la provincia entre el partido de Milei y el Pro del expresidente. “Voy a dejar el alma para defender el rumbo y frenar a los que quieren que explote el país”, publicó Santilli en X, en referencia, una vez más, al kirchnerismo. Su tarea será titánica. El 7 de septiembre pasado, la ultraderecha perdió por más de 13 puntos en las elecciones para el congreso provincial en Buenos Aires. La escandalosa salida de Espert no augura una remontada en las urnas.