Argentina arrastra a Taylor Swift a la campaña electoral: “Las swifties no votamos a Milei”
La estrella pop actúa en el primero de sus tres conciertos agotados en Buenos Aires el fin de semana previo a la segunda vuelta presidencial
Tras medio año esperando, Argentina se acerca al día definitivo. El país espera en vilo, y después de cinco meses de campaña, la segunda vuelta presidencial del próximo 19 de noviembre, pero para miles de personas el día era este jueves: la primera presentación de Taylor Swift en Buenos Aires. La visita de la estrella pop del momento corrió a la par de la campaña electoral. En junio, mientras los partidos decidían sus candidatos para las primarias, Swift agotó las entradas de sus tres conciertos en el estadio de River Plate en minutos. Ahora, mientras medio país teme una victoria del ultraderechista Javier Milei el próximo domingo, muchos grupos de fanáticos de la cantante han salido a clamar en su contra. “Las swifties no votamos a Milei”, dice un cartel que ha empapelado los alrededores del estadio, en el norte de la capital argentina. El razonamiento es sencillo: Milei admira a Donald Trump y a Taylor Swift no le gusta el expresidente estadounidense.
La politización de los fanáticos argentinos de Taylor Swift ha dividido aguas. Tras las elecciones del pasado 22 de octubre, que dejaron a Milei segundo detrás del peronista Sergio Massa y forzaron una segunda vuelta, un grupo de fanáticos de Taylor Swift llamó a no votar a Milei en la segunda vuelta. Taylor Swift había dicho en un documental que necesitaba ser crítica con Trump para estar “del lado correcto de la historia”, y un grupo de ‘swifties’ argentinos recogió el guante. Llamaron “derecha antidemocrática” al partido de Milei y criticaron que sus candidatos “consideran que el matrimonio igualitario es innecesario, dicen que el feminismo es una mentira, que la brecha salarial por género no existe y consideran que habría que habilitar la venta de órganos”, en un comunicado en redes sociales.
No todos los ‘swifties’ piensan lo mismo. Este jueves, antes del primero de los tres conciertos que dará Taylor Swift en Buenos Aires, los alrededores del estadio de River Plate amanecieron empapelados con consignas contra Milei. “Taylor habló en contra de Trump porque es racista y homófobo, pero en Argentina la historia es más complicada”, dice Malena, fanática de 27 años, que llegó sola al estadio de River Plate cerca de las dos de la tarde. “Claro que me dan miedo algunas cosas de Milei, pero creo que Argentina necesita un cambio de lo de siempre”. Autónoma que trabaja manejando redes sociales de distintos clientes, Malena afirma que votará a Milei porque “no puede ser que se mate trabajando y apenas le haya alcanzado para ahorrar por la entrada”.
Tiene un punto. Ver a Taylor Swift en Buenos Aires se convirtió en una ganga para el público extranjero. Entre cambios diferenciales para turistas y tarjetas emitidas en el exterior, el ticket más caro salía 155 dólares. En junio, mientras muchos adolescentes argentinos no llegaban a pagar su entrada, cientos de fanáticos en el exterior hicieron la cuenta: entre el billete de avión a Buenos Aires y la entrada, salía más barato hacer el viaje a Argentina que intentar comprar un boleto de reventa en Estados Unidos.
“Todo el viaje no fue realmente barato, pero no la pude ver en Chicago y cuando me animé a comprar los boletos para verla en Buenos Aires planeamos todo un viaje”, dice Maddie, de 30 años, que llegó con su novio el miércoles desde Estados Unidos tras planear una vacación en Argentina por haber conseguido entradas para Taylor Swift. “No sé nada de política argentina, pero el país está baratísimo si tienes dólares para cambiar en la calle. Es bueno para los turistas, pero imagino que es horrible para los argentinos. ¿Van a votar a alguien que admira a Trump? No creo que sea la solución”.
“Preferiría no hablar de política”, dice Horacio, de 24 años, que vino a ver a Taylor Swift desde la provincia de Buenos Aires. “No voy a votar a Milei porque estoy convencido de que pone en riesgo la democracia del país, no porque Taylor opine a favor o en contra”.
— ¿Tendrá influencia lo que pueda llegar a decir sobre las elecciones?
—No creo que diga nada. Pero creo que hoy es una oportunidad para volver a lo importante. Argentina es un país de aguante, hoy estamos miles acá por amor a Taylor y eso tiene que contagiar. ¿Milei se bancaría que estemos acá gays, extranjeros, jóvenes, viejos solo por amor a alguien? No creo.
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