Las oportunidades de la Electricidad 4.0 en México
Eficiencia, sostenibilidad y seguridad son tan sólo tres de los pilares de la actual revolución industrial, sobre los cuales la transformación energética tiene en México un terreno amplio y lleno de oportunidades
Los próximos 15 años serán decisivos para México en materia energética. En contexto, y de acuerdo con el Programa para el Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (PRODESEN), factores como el crecimiento poblacional y económico, los cambios climáticos, el precio de los combustibles fósiles, entre otros, apuntan a una transformación y modernización urgente con el fin de garantizar el suministro eléctrico de todo el país.
En esta tarea por llevar a cabo una transición con calidad, continua, confiable y segura -misión conjunta entre los organismos públicos y la iniciativa privada-, las industrias tienen la responsabilidad de implementar soluciones inteligentes, eficientes e integradas, que conecten de la mejor manera las áreas sensibles y estratégicas de la compañía, más allá de una simple actualización de herramientas.
En este sentido, el sector productivo de México tiene en la Electricidad 4.0 a un aliado sólido y estratégico que puede enfocar todo el potencial de las compañías, de tal manera que la digitalización a partir de soluciones energéticas puede transformar y robustecer las capacidades competitivas y de crecimiento de la empresa, acorde con sus capacidades, necesidades y objetivos.
Además, y en función de que actualmente los usuarios industriales representan más del 40% del consumo energético mundial, existe una gran oportunidad para las compañías locales de mejorar su eficiencia energética aprovechando las ventajas de las principales tendencias de este sector, cumpliendo además con las medidas mundiales de descarbonización y uso de energía y acciones más limpias, incluso más funcionales que las que se tienen ahora.
Un momento decisivo
De acuerdo con expertos en el sector, el consumo de energía eléctrica para 2050 crecerá cerca de 50%, por lo que los procesos en la industria demandan vías alternas. Esto, aunado a la constante volatilidad del mercado y la reconfiguración acelerada de los modelos de consumo, dibuja un panorama que clama urgentemente por empresas más seguras, que contaminen menos y que hagan un uso mucho más inteligente de sus recursos, flexibles y adaptables a los cambios.
Es por ello que las soluciones aplicadas que brinda la Energía 4.0 (big data, inteligencia artificial, operación remota, monitoreo y medición integral, estabilidad de red, seguridad y protección digital, etc.), representan una oportunidad vital especialmente para las cerca de 4.2 millones de Pequeñas y Medianas Industrias de México (PyMes), las cuales concentran alrededor del 52% del Producto Interno Bruto y generan el 70% del empleo formal en todo el país.
Es por ello que resulta importante recalcar el hecho de que una transformación energética efectiva en la cadena de suministro como la que plantea la Energía 4.0 se traduce en beneficios y oportunidades claras a todos los niveles.
Actualmente, el 75% de la energía que produce es a través de combustibles fósiles, actualmente los más contaminantes y también los que ya han planteado un panorama finito y costoso tanto a nivel financiero como ambiental.
Entre más empresas comiencen a ocuparse de la innovación digital al interior de sus estrategias y operaciones, también vendrán algoritmos y tecnología necesaria para hacer empresas mucho más sostenibles, inteligentes, eficientes, seguras y confiables. Y con la Electricidad 4.0, el futuro es hoy y las ciudades inteligentes comienzan a tomar forma desde todos sus espacios: casas, edificios, centros de datos, industrias, infraestructura y redes, para así construir un mundo más sostenible, resiliente y eficiente.