Una masiva protesta ha puesto contra las cuerdas al Gobierno de Kirguizistán, una de las ex repúblicas soviéticas más pobres y clave en la estrategia de EE UU en Afganistán, pues en ella tiene una de sus bases aéreas más importantes de Asia Central. Las manifestaciones, que comenzaron el martes con una protesta contra la subida de los combustibles y la corrupción, se transformaron ayer en violentos enfrentamientos con la policía en la capital, Bishkek.
Setenta años después de la matanza de Katyn, el bosque homónimo, cerca de la ciudad rusa de Smolensk, vivió ayer una jornada histórica. En una iniciativa sin precedentes, el primer ministro ruso, Vladímir Putin, se unió a su homólogo polaco, Donald Tusk, en una ceremonia en recuerdo de los 22.000 militares polacos asesinados por la policía secreta de Stalin, el NKVD (precursora del KGB), entre 1939 y 1940, tras el reparto de Polonia entre la Unión Soviética y la Alemania nazi.
Bandera española en mano, decenas de vecinos van llegando a las puertas del centro de salud de la localidad portuguesa de Valença do Minho, junto a la frontera con Galicia. Como cada tarde, la concentración está convocada a las 6 de la tarde, para iniciar una manifestación cuyo destino se mantiene en secreto hasta el último momento para tratar de despistar a los efectivos de la Guardia Nacional Republicana (GNR).
El rosario de banderas españolas que lucen en Valença estos días roza la insolencia, dicen en Tui. La unión ibérica "es un tema que no se puede mentar", una de las grandes polémicas que pisa callos al otro lado de la raia (raya, frontera), sostiene el historiador tudense Rafael Sánchez Bargiela.
Tras recibir el zarpazo de la naturaleza durante casi dos días ininterrumpidos, Río de Janeiro volvía ayer a una extraña normalidad. Los aguaceros remitieron, el grueso de las inundaciones fue desapareciendo y la ciudad recobró, poco a poco, su frenética actividad. Aunque las escuelas y las universidades permanecieron cerradas, el comercio, las oficinas y los organismos públicos volvieron al trabajo.
Una serie de críticas cruzadas entre la Casa Blanca y el presidente de Afganistán, Hamid Karzai, han provocado una tensión entre ambos Gobiernos que ha llevado a Barack Obama a plantearse cancelar el encuentro con el mandatario afgano previsto para el próximo 12 de mayo en Washington, según su portavoz.
Los llamados camisas rojas, que exigen elecciones anticipadas en Tailandia con manifestaciones diarias en Bangkok desde mediados de marzo, irrumpieron ayer en el Parlamento, forzaron la interrupción de la sesión y provocaron la huida en helicóptero de varios diputados, entre ellos, el viceprimer ministro y responsable de Seguridad, Suthep Thuagsuban.