Una vieja terapia para un nuevo problema
Las terapias para el entrenamiento del olfato han cobrado una especial importancia ante el aumento de pacientes que, tras pasar el coronavirus, pierden el gusto y el olfato
Los otorrinolaringólogos han utilizado las terapias para el entrenamiento del olfato desde hace años, pero desde el inicio de la pandemia, este método ha cobrado una especial importancia para el 80% de los contagiados sintomáticos de COVID-19 que han perdido el gusto y el olfato como un síntoma más de la enfermedad.
En el vídeo que acompaña esta noticia, el médico responsable de la Unidad de Olfato del Hospital Clínico de San Carlos, Pablo Sarrió, cuenta que la cantidad de pacientes que recibe en su consulta se ha duplicado desde el inicio de la pandemia. “La gran mayoría de pacientes que ha pasado el virus recuperará el olfato al cabo de un mes y medio”, explica Sarrió. Los casos en los que la anosmia (el término por el cual se conoce la pérdida de gusto y de olfato en la medicina) persiste son los que se atienden en esta consulta. En el reportaje en vídeo acompañamos a uno de estos pacientes para conocer en qué consiste la terapia que hoy se plantea como la mejor vía para recobrar el olfato tras pasar la infección por coronavirus.