Trump y los demócratas abren un frente por la lucha contra el crimen en las ciudades
El presidente afirma que movilizará a la Guardia Nacional para reducir los índices delictivos mientras los alcaldes y gobernadores acusan que la maniobra tiene tintes políticos


Nuevo frente de batalla entre Donald Trump y la oposición. Las cifras del crimen en los grandes bastiones demócratas, especialmente en las principales ciudades del país, ha servido al presidente para amenazar con la posibilidad de movilizar tropas federales, como ya hizo a Los Ángeles en junio. La advertencia ha tensado el ambiente político en el país, pues los alcaldes y figuras progresistas acusan las motivaciones detrás de la decisión, que deja fuera a otras zonas metropolitanas con altos índices de robos y homicidios, pero que se encuentran en Estados gobernados por republicanos.
“Chicago es la peor y más peligrosa ciudad en el mundo, por mucho”, escribió este martes Trump en Truth Social. El presidente lleva azuzando a la tercera ciudad más grande del país desde hace semanas, pero su amenaza reciente coincidió con un sangriento fin de semana largo por el Día del Trabajo. A lo largo de cuatro días se registraron ocho muertes y 50 heridos en varios incidentes en barrios del oeste y sur de la urbe. El puente dejó un fallecido más que los siete registrados en el mismo periodo de 2024 en Chicago. “Pritzker [el gobernador demócrata de Illinois] necesita ayuda urgentemente, aunque no lo sabe todavía. Solucionaré el problema rápidamente, justo como hice en DC”, añadió Trump en su mensaje.
El mandatario se refiere a la polémica orden que sacó a la Guardia Nacional, una fuerza militar compuesta por reservistas de otros Estados, a las calles de la capital estadounidense. Según Trump, la delincuencia en el Distrito de Columbia era “el peor del mundo”. El despliegue de 800 elementos armados a realizar tareas de seguridad que en realidad corresponden a la policía crispó rápidamente el clima político.

En medio de la crisis, la alcaldesa demócrata Muriel Bowser se vio obligada a repetir que las cifras de delincuencia están en uno de sus momentos más bajos en casi tres décadas y que los problemas que padecen son los de cualquier metrópolis de gran tamaño. La regidora recordó que Washington D.C. ni siquiera figura en la lista de las ciudades más violentas del país. También reconoció que el despliegue de los guardias ha ayudado a bajar aún más crímenes como el robo de autos.
Trump, no obstante, se ha puesto como objetivo otras ciudades. Además de Chicago, Portland, Seattle, San Francisco, Oakland y Baltimore han sido mencionadas entre las candidatas de recibir fuerzas armadas federales. La advertencia más reciente ha sido emitida por el presidente esta tarde desde la Casa Blanca: “Washington es una plantilla, haremos lo mismo en otras ciudades”.
El presidente se refirió la tarde del martes a Baltimore (Maryland), una ciudad que tiene 60% de población negra. “El gobernador [Wes Moore, demócrata] ha dicho que lo que necesitan es vivienda. No, lo que necesitan es deshacerse de todo ese crimen, la gente que tiene son delincuentes duros”, aseguró en el Despacho Oval. La semana pasada, durante una reunión del Gabinete, calificó la urbe, a solo 65 kilómetros de Washington, como un “infierno”.
Los números, sin embargo, indican que Baltimore ha logrado reducir un 25% delitos como homicidios y violaciones en el primer semestre de 2025, comparado con el mismo periodo del año pasado. Los homicidios llevan tres años a la baja y se encuentran un 35% por debajo de los niveles de 2018, durante la primera Administración Trump. El gobernador Moore dijo que encargar las tareas de seguridad pública a la Guardia Nacional no es “sustentable, constitucional ni una tarea respetuosa”.
Críticas demócratas
A pesar del choque entre la Casa Blanca y los políticos demócratas, los estadounidenses respaldan las tácticas de Trump. Ocho de cada diez personas creen que la inseguridad es un grave problema de las ciudades más grandes. El 55% de la población ve bien que el Ejército y la Guardia Nacional auxilien a las policías locales en trabajos de seguridad pública, de acuerdo con una encuesta de finales de agosto elaborada por la agencia AP y NORC, un centro de investigación apartidista dentro de la Universidad de Chicago.
El sondeo deja claro la brecha que existe entre quienes se identifican como simpatizantes de un partido. El 78% de quienes se definen como demócratas creen que es inaceptable que las fuerzas federales asuman el control de los cuerpos locales. En cambio, el 51% de los republicanos lo ve con buenos ojos.
El robusto respaldo del país a los operativos de seguridad ha forzado a algunos políticos demócratas a seguir la estela de la Casa Blanca. Gavin Newsom, el gobernador de California y uno de los principales críticos de Trump, anunció la semana pasada que desplegaría a la California Highway Patrol (CHP, por las siglas en inglés), el cuerpo de seguridad estatal, en seis puntos de la región: San Diego, Inland Empire, Los Ángeles, el Valle Central, San Francisco y Sacramento, la capital local.
Where is Trump’s attention to this matter? pic.twitter.com/eYHpi29jGT
— Governor Gavin Newsom (@CAgovernor) August 28, 2025
Newsom comunicó su decisión en una conferencia de prensa en la que se burló de la estrategia de Trump para golpear a los bastiones demócratas del país. “Quizá el presidente pueda desplegar a la Guardia Nacional en todos los rincones de Mississippi [Estado republicano], que tiene una tasa de homicidios de 180% por arriba de Los Ángeles, una ciudad que tiene más personas que todo el Estado. Los índices de homicidio están ahí totalmente fuera de control. Es una carnicería. Esto si en realidad les interesa el crimen y la violencia”, aseguró en una conferencia de prensa en la que estuvo flanqueado por elementos de la CHP.
Newsom también repasó otros bastiones conservadores con altos índices de violencia, como Luisiana, Tennessee y Arkansas. No hay elementos federales desplegados en esos territorios, subrayó el gobernador. Trump, en cambio, se ha mostrado abierto a la posibilidad de enviar tropas a urbes de su partido. “Lo haría, pero no hay ciudades republicanas con tanta violencia”, dijo recientemente. Las cifras del FBI apuntan, no obstante, a que existen al menos 12 ciudades con los mismos o mayores índices de inseguridad que Washington D.C.
En la comparecencia, el mandatario local, quien tiene aspiraciones presidenciales en 2028, aseguró que la tasa de homicidios en el Estado ha caído un 20% el último año. Los robos con violencia también registran una tendencia a la baja, de 19%. Newsom intenta repetir con su despliegue los éxitos que dejaron en 2024 operativos en las áreas de Bakersfield, San Bernardino y Oakland, una de las ciudades criticadas por Trump. Estos dejaron más de 9.000 personas detenidas y la recuperación de 5.800 vehículos robados.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
