Columna

Rabia y muerte en los Sudetes

Series como ‘Cuando cae la noche’ certifican que la ficción puede ser útil para comprender la Historia

Una imagen de la serie ‘Cuando cae la noche'.

Dos citas convenientes para comprender mejor una serie como la checa Cuando cae la noche (Amazon Prime Video): “Lo que digo es que, cuando el pasado no nos gusta, tendemos a esconderlo o ignorarlo o maquillarlo; lo que digo es que la verdad no nos gusta: nos gustan las mentiras”. Javier Cercas. “La literatura puede ser rehabilitada en tanto que supone una forma de representación y de conocimiento del pasado, y del presente, útil para los historiadores”. Isabel Burdiel. Un escritor y una historiadora que sitúan el objetivo de la serie.

Un joven virólogo es enviado a un remoto pueb...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Dos citas convenientes para comprender mejor una serie como la checa Cuando cae la noche (Amazon Prime Video): “Lo que digo es que, cuando el pasado no nos gusta, tendemos a esconderlo o ignorarlo o maquillarlo; lo que digo es que la verdad no nos gusta: nos gustan las mentiras”. Javier Cercas. “La literatura puede ser rehabilitada en tanto que supone una forma de representación y de conocimiento del pasado, y del presente, útil para los historiadores”. Isabel Burdiel. Un escritor y una historiadora que sitúan el objetivo de la serie.

Un joven virólogo es enviado a un remoto pueblo para estudiar un brote de rabia. La víspera de su llegada se produce un doble asesinato. El científico se involucrará desde el primer momento en la resolución de los mismos, al parecer vinculados a animales rabiosos. Sus pesquisas le llevan a una inquietante conexión con los hechos históricos de lo que se llamó “la crisis de los Sudetes”, iniciada en 1938 por los nazis en colaboración con un sector de los checos. Una minoría de alemanes que vivían en la región aterrorizaron a los lugareños. Tras la derrota de Alemania en la Segunda Guerra Mundial, los Sudetes volvieron a formar parte de Checoslovaquia y la población de origen alemán fue masivamente expulsada.

Ocupación y liberación de una zona que conllevó torturas, violaciones y ejecuciones, un eslabón de lo que podría llamarse, con Borges, Historia universal de la infamia y que generó el odio acumulado de quien cometería, décadas después, una serie de asesinatos en el remoto pueblo checoslovaco. “La literatura”, en este caso una serie de televisión, “como forma de conocimiento del pasado”, “una verdad que no nos gusta”. La ficción para comprender la Historia.

Más información

Archivado En