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Un taller para mujeres invisibilizadas

España es el primer destino europeo de mujeres víctimas de trata con fines de explotación sexual. Mujeres vigiladas y sometidas a una esclavitud que las hace invisibles. Rocío Nieto lleva 35 años denunciando la trata, trabajando para que las mujeres prostituidas recuperen su dignidad y sean protagonistas de sus propias vidas

Si la historia de Rocío te ha hecho pensar y tú también quieres ayudar a esta causa para cambiar el mundo

ACTÚA

Cynthia (nombre ficticio) remueve sus manos entre decenas de ovillos de colores para buscar el hilo perfecto con el que dar el último pespunte. En un rincón, bajo la luz de un flexo, prepara el cabezal de su máquina de coser para bordar la última pieza de una prenda especial. A Cynthia le encanta el textil y el diseño de moda, pero nunca pudo tener un trabajo para demostrar su talento. Con 16 años fue explotada sexualmente en un piso de Pamplona. Ahora tiene 20 años y trabaja con un tejido exclusivo, cuya composición conocen solo unos pocos y que, con esa fórmula y tacto tan peculiar, ha conseguido devolver la autoestima a cientos de mujeres invisibilizadas. Este tejido exclusivo está compuesto por el personal del taller de confección APRAMP, una red de mediadores y supervivientes de trata que ofrecen atención a mujeres como Cynthia.

A medio tiro de la calle de la Ballesta, en Madrid, Rocío Nieto dirige este taller, el único en España en el que se elaboran faldas, blusas o bolsos con un tejido tan particular. Es la fórmula que esta trabajadora social lleva puliendo 35 años y que poco a poco ha ido calando, primero entre los pequeños comercios del barrio y luego entre grandes almacenes, políticos, artistas, influencers o incluso entre conocidos diseñadores y marcas que han acudido al taller para materializar sus patrones con la famosa materia prima. Saben que no van a hacer fortuna con ello. No importa el precio; lo valioso es su poder para recuperar dignidades perdidas.

Un tejido mágico

Más de dos millones de personas en 160 países son víctimas de trata. El 80% corresponde a mujeres y niñas. Mujeres que salen engañadas de Nigeria, Rumanía o Malí y que acaban atrapadas por una deuda imposible y mil promesas en un piso en España mientras se les obliga a ejercer la prostitución. El local de APRAMP atiende diariamente a 12 o 13 de estas chicas que quieren romper lazos con ese pasado hostil y no saben cómo hacerlo.

Escaparate de la asociación.
Escaparate de la asociación.

Allí se encuentran con ese tejido mágico que trabaja Cynthia y que les va a ayudar a pilotar sus vidas. Ese tejido especial no es de tela. Lo forman un entramado de profesionales y supervivientes de trata que sirven de primer enlace para escapar del miedo y la sumisión que provocan las mafias. Se trata de un equipo de técnicos que van hilando poco a poco su reinserción social y laboral. Pero, sobre todo, se van a encontrar con una red de mujeres muy poderosa, una comunidad de supervivientes que se apoya en la convivencia de los pisos de protección, que se turna para atender los pedidos del taller textil, que aprovecha su rodaje de calle para negociar de tú a tú con los concejales de turno o que animan a las recién llegadas: “Tú puedes llegar a ser lo que realmente quieras”, les dicen al entrar.

La hilandera

Lejos quedan aquellos pasillos de las pensiones de Montera y Jacinto Benavente de los ochenta, donde los niños jugaban solos mientras sus madres terminaban algún servicio en las habitaciones. Rocío Nieto estaba embarazada por entonces y recuerda su indignación al tropezarse con un problema sin apenas respuesta social: “Se atendía la droga, se atendía al anciano, pero a estas mujeres y a sus hijos no se las consideraba”.

Hilos de colores.
Hilos de colores.

Allí nació la primera hebra, se empezó a tejer una confianza que ya nunca se quebraría: “Simplemente me reunía con ellas, a veces en cafeterías... para conocer sus problemas y así poder intentar darles respuesta. Hicimos una gran dinámica de grupo”… que todavía dura. Mientras crecía la marginación contra el colectivo, Rocío se pateaba las pensiones para recomendar el uso del preservativo o cualquier detalle para mejorar sus condiciones higiénico-sanitarias. Todo ese esfuerzo se tradujo en vínculos perpetuos, pero también en críticas hacia ella y su marido: “¿Cómo puedes dejar que tu mujer se dedique a esas chicas?”, le decían en las reuniones de sociedad.

Pero la bobina seguía girando y tejiendo red. Muy pronto llegaría el primer piso de fin de semana, un espacio de confianza para que estas mujeres ejercieran su maternidad en libertad. Y luego vendrían el Centro de Atención (1985), la Unidad Móvil de Rescate para informar y proteger a las chicas de la calle (1990), el equipo de mediadoras, el taller textil. APRAMP, la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida, creada por Rocío en 1984, atiende a 2.300 mujeres. Ha montado este supertejido con un 70% de éxito en integración laboral.

El desfile final

En la trata la víctima es siempre una mujer o una niña que acaba estigmatizada y destroza su autoestima. En el taller de costura se inicia un proceso de reconstrucción personal mediante una salida laboral digna: “A mí lo que más me gusta de ellas es que aquí, en el taller, están aprendiendo realmente a poner precio a su trabajo, un trabajo que les proporciona verdadera autonomía”, nos recuerda orgullosa Rocío.

Una mujer trabaja en Bendito bolso.
Una mujer trabaja en Bendito bolso.

Para recuperar esa autoestima, APRAMP ha organizado desfiles profesionales de moda dentro del programa Pespuntes de libertad, una oportunidad para que algunas de las mujeres que estaban en proceso de reinserción lucieran modelos del diseñador Manuel Fernández encima de una pasarela. “Ellas han logrado lo que queríamos: ser autónomas, no tener miedo a que las vea cantidad de gente y ser capaces de coser y hablar con la gente para contar la historia de su vida, que es muy fuerte”.

“Pensaba que mi vida no tendría solución, que era mi destino. Pero hay que seguir soñando. Siempre voy a estar agradecida a APRAMP”, apunta Cynthia.

De esos sueños y del trabajo de sus manos termina de salir un ejemplar único e irrepetible de Bendito Bolso, otra de las piezas mágicas de taller textil de APRAMP con las que se financia este proyecto y que está de moda entre famosos e influencers. Diseños muy coloridos y exclusivos, fabricados con algodón orgánico y de proveedores socialmente responsables. “No es perfecto, pero es único”, reza la marca en Instagram. Es un lema que inspira el sueño de libertad de Cynthia y todas estas mujeres que han superado un pasado gris y que ahora pueden desfilar por la vida libremente y en color gracias al trabajo de Rocío, de sus compañeras, de los diseñadores, de los formadores, de los trabajadores sociales y de todo este tejido mágico que es APRAMP.

Escucha la historia de Rocío


Contenido adaptado del vídeo de Rocío

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La trata de personas mueve cinco millones de euros al día en España. El 62% son mujeres y niñas que son obligadas a ejercer la prostitución. Rocio Nieto fundó APRAMP para ofrecerles una salida creando oportunidades laborales.

00:26. Rocío Nieto. Me gustaba el tema social, de siempre. Hice trabajadora social…

00:30. Rocío Nieto. Cuando empecé en Orcasitas a hacer informes, me encontraba cantidad de mujeres, de niños, que vivían en chabolas…

00:37. Rocío Nieto. Después, al venirme ya el centro de Madrid, vi que aquí había otro problema gravísimo, que era la prostitución en las calles.

00:44. Rocío Nieto. Mujeres que se ponían en Jacinto Benavente, sentadas, me dijeron: ”Mi marido es alcohólico y yo me vengo aquí, dos, tres horitas para llevarme un ingreso a casa”... y empecé diciendo: “Bueno, ¿qué es lo que necesitáis?”.

01:01. Rocío Nieto. Y empecé a reunirme con ellas, establecimos nuestras reuniones periódicas, ellas me traían a más mujeres. Así hicimos una dinámica de grupo, y esa dinámica de grupo nos sirvió a todas: a mí, a conocer sus problemas, para luego darle respuestas según las necesidades.

01:16. Rocío Nieto. Sabía que este proyecto no era fácil, porque sé que es muy fácil entrar en la prostitución y muy difícil salir.

01:25. Rocío Nieto. APRAMP atiende a 2300 mujeres. Ojalá pudiéramos ayudar a todas. Yo siempre digo: “Estas mujeres, cuando las protegemos en un piso, cuando las informamos... las tenemos que: acoger, proteger y, sobre todo, sobre todo, formar. Y formar es para un futuro trabajo”.

01:46. Rocío Nieto. Este taller, desde el principio, desde hace ya 35 años, se hizo porque, reuniéndolas, ¿y qué sabéis hacer? ¿Oye, por qué no hacemos trajecitos, una cestita...? Tuvimos dos objetivos al hacer este taller: sensibilizar a la población y humanidad para colaborar en él y que de ahí salga una solidaridad…

02:08. Testimonio beneficiaria. Cuando entré a APRAMP, y fue donde conocí a Rocío, solo me ha visto como una mujer normal, una chica joven que puede hacer lo que quiere, no una chica que está en la calle, que no tiene futuro, que no tiene vida.

02:20. Rocío Nieto. Es una manera muy sencilla para atraer a las mujeres y para que sus habilidades se desarrollen en el taller.

02:28. Rocío Nieto. Significa que ellas han logrado ser autónomas, que las empodere y que sean ellas las portavoces de su proyecto y, sobre todo, que tengan un empleo futuro que les da la libertad.

02:41. Rocío Nieto. Aunque solo sea una, pero merece la pena.

 

Este contenido ha sido elaborado por Yoigo.

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