La Iglesia defiende el uso de preservativos, la abstinencia y la fidelidad contra el sida

La Conferencia Episcopal Española se ha mostrado hoy a favor del uso del preservativo como método para evitar el contagio del sida, aunque eso sí, dentro de una estrategia combinada con otros métodos más habituales en el discurso de la Iglesia católica: la abstención y la fidelidad.

El secretario general y portavoz de la Conferencia, Juan Antonio Martínez Camino, ha realizado estas afirmaciones tras su entrevista con la ministra de Sanidad, Elena Salgado, con la que se ha reunido para acercar posturas precisamente sobre el sida.

A la salida del encuentro ha señalado que el uso de...

La Conferencia Episcopal Española se ha mostrado hoy a favor del uso del preservativo como método para evitar el contagio del sida, aunque eso sí, dentro de una estrategia combinada con otros métodos más habituales en el discurso de la Iglesia católica: la abstención y la fidelidad.

El secretario general y portavoz de la Conferencia, Juan Antonio Martínez Camino, ha realizado estas afirmaciones tras su entrevista con la ministra de Sanidad, Elena Salgado, con la que se ha reunido para acercar posturas precisamente sobre el sida.

A la salida del encuentro ha señalado que el uso de los preservativos "tiene su contexto en una prevención integral y global" contra esta enfermedad, y ha reforzado su tesis argumentando que la posición de la Iglesia está avalada por estudios científicos publicados en la prestigiosa revista médica The Lancet, que según ha dicho defienden el uso combinado de estos tres métodos: abstención, fidelidad y preservativo. El portavoz de la Conferencia estaba haciendo referencia a la denominada Estrategia ABC, defendida por el Gobierno estadounidense y que ha creado mucha polémica entre los expertos médicos y políticos.

Camino ha definido la reunión, en la que se ha hablado "sólo de sida", como "muy distendida y amable", y ha explicado que su objetivo era "poder comprender bien las posturas" del Gobierno, "entenderse" con la ministra y "colaborar", pues la Iglesia está "muy preocupada y muy interesada" en hacer frente a este "grave problema". A su juicio, existen "determinados prejuicios" contra la postura de la Iglesia en este tema.