Sucumbirás al look azafata

Aunque en plena época del low cost nos cueste imaginarlo, hubo un tiempo en el que volar era sinónimo de glamour y lujo. Olvídate de los asientos raquíticos destrozados y la comida vomitiva de las compañías de hoy en día. Aquello era otra cosa. Era un tiempo en el montarse en un avión era una experiencia única que pocos podían permitirse. Una década en la que las azafatas se vestían, se maquillaban y peinaban impecablemente y a nadie se le p...

Aunque en plena época del low cost nos cueste imaginarlo, hubo un tiempo en el que volar era sinónimo de glamour y lujo. Olvídate de los asientos raquíticos destrozados y la comida vomitiva de las compañías de hoy en día. Aquello era otra cosa. Era un tiempo en el montarse en un avión era una experiencia única que pocos podían permitirse. Una década en la que las azafatas se vestían, se maquillaban y peinaban impecablemente y a nadie se le pasaba por la cabeza ponerse ropa cómoda para viajar, porque el mero hecho de embarcar era un acto social de alto standing.

Eran los años 60, una década dorada que marcó para siempre la historia de la aviación. Y es precisamente esta época la que sirve de contexto para contar las aventuras de las azafatas de la serie de televisión más esperada de la temporada, Pan Am, que se estrenó anoche en Estados Unidos. Es España tendremos que esperar hasta octubre para verla en Canal +. En ella veremos las historias de amor, venganza y espionaje de un grupo de azafatas que viajarán por todo el mundo, en una época en la que la mujer prototipo estadounidense solía quedarse en casa cuidando de su perfecta familia. Pero eso no es todo. También veremos mucha moda. Moda de la de verdad. Mucho lady look. Cortes fenenimos y elegantes. Peinados de los que hay que estar unas cuantas horas con los rulos puestos y mucho labio en tonos rosados.

En la mayoría de las escenas veremos a las protagonistas de la serie, entre las que se encuentra Cristina Ricci en lo que supone su inmersión definitiva en el mundo de la televisión, con sus uniformes de trabajo. Los uniformes son una réplica casi exacta de los que llevaban en la época las azafatas de Pan Am, compañía real que cerró en 1991 tras quedarse en bancarrota. Quizá lo que llame más la atención del uniforme y lo que se convierta en un total hit de los aeropuertos del mundo sea la bolsa de viaje de piel azul con el logo de la compañía con la que viajan las azafatas.

De momento ya hay dos vías para conseguir una de ellas: participando en un concurso que ha organizado la propia serie a través de su Twitter o pagango los 89 dólares (64 euros) que cuesta una en la página web de accesorios 'Pan Am'. Además de bolsas de viaje, encontrarás fundas de pasaporte y relojes. Pero no todo será trabajo en Pan Am. También veremos a sus protagonistas vestidas de calle con elegantes vestidos sesenteros en tonos pastel acompañados por cardigans cortitos. Todo muy Jacqueline Kennedy. Y lo mejor de todo: aprenderemos a un poner una sonrisa Pan Am, una expresión que se utiliza en Estados Unidos para definir un tipo de sonrisa extremadamente perfecta, pero un poco forzada, casi falsa. Que tiemble Mad Men, las chicas de Pan Am vienen dispuestas a comerse el mundo.