San Valentín para despechados

Cuenta la leyenda que Cupido se enamoró de una princesa llamada Psique. Al eclipsar en belleza a Afrodita, madre de su amado, ésta le impuso arduas tareas para conseguir el amor de Cupido, pero finalmente pudo tener su final feliz junto al pequeño dios.

La historia de Cupido y Psique es el paradigma del amor romántico y contagia por un día todos los escaparates y restaurantes con exaltaciones al amor y promesas de fidelidad eterna. Sin embargo, el “comieron perdices” a menudo dista mucho de la realidad. Antes de ahogar a Psique en un torrente de rosas y bombones con ...

Cuenta la leyenda que Cupido se enamoró de una princesa llamada Psique. Al eclipsar en belleza a Afrodita, madre de su amado, ésta le impuso arduas tareas para conseguir el amor de Cupido, pero finalmente pudo tener su final feliz junto al pequeño dios.

La historia de Cupido y Psique es el paradigma del amor romántico y contagia por un día todos los escaparates y restaurantes con exaltaciones al amor y promesas de fidelidad eterna. Sin embargo, el “comieron perdices” a menudo dista mucho de la realidad. Antes de ahogar a Psique en un torrente de rosas y bombones con forma de corazón, Cupido probablemente se habría liado el laurel a la cabeza para terminar en un affaire con una entrenadora de cuádrigas, si Psique antes no lo despachaba con un “Cupido, no eres tú, soy yo” o “Cupido, lo siento pero no eres mi tipo”.

El catorce de febrero es una fecha marcada de rojo en el calendario, pero ya no como una conmemoración al amor, sino como una reivindicación de todo lo contrario. Así, tanto los Cupidos despechados como las Psiques modernas (o viceversa) encuentran su lugar en ese día y deciden celebrar San Valentín de otra manera.

En casos de ruptura reciente, Amazon ofrece la posibilidad “tirita” de hacerse con un kit de supervivencia que reconforta y ofrece un alivio contra “almas hechas añicos, auto lamentaciones y dolores de corazón insoportable”.

Hay mil formas de decir “te quiero”, pero también “olvídate de mí”. Para aquellas Psiques vengativas existe una gran oferta de anti regalos con los que lanzar ese mensaje: desde ramos de flores muertas o decapitadas  a sets de cuchillos en forma de muñeco vudú que pueden recordar “ligeramente” a un ex, pasando por todo un ajuar de camisetas y otras prendas con frases tan directas como “Cupid is stupid” o “Forever was a lie” (“Siempre fue una mentira”).

Aunque estudios relativamente recientes de una universidad británica han demostrado que no es saludable bloquear a un ex en Facebook, Internet ofrece en bandeja de plata varias páginas que ayudan a borrarle de la faz de la Tierra (y de la Red). Una de ellas es iBreakup.net, que al igual que Blockyourex.com permiten bloquear a la vez a un ex en todas las redes sociales. Otras websites van un paso más allá, como deshacerse de todos las joyas y regalos que recuerdan a él o incluso formar parte de comunidades online que ayudan a “olvidar a un ex y sacar la bomba que todos llevamos dentro”, como es el caso de Pink kisses.

Soltero sí, y a mucha honra

Ya no es necesario marcar San Valentín con V de Vendetta, y las Psiques de ahora que eligen festejar su soltería por todo lo alto ya gozan de nombre propio: Quirkyalone. Este neologismo, que apareció por primera vez en 1999 en una revista americana, designa a aquellas personas que no se oponen a tener una relación, pero que defienden con orgullo su estado de solteras.

Así, el catorce de febrero también se ha convertido en el día oficial de los no emparejados, al que se ha definido con el nombre de Single Awareness Day (Día de la Concienciación de los Solteros, resumido en las siglas S.A.D day), si bien hay países con versión propia, como es el Black Day en Corea del Sur, donde se celebra el día comiendo fideos, o el Single's Day en China, aunque en su caso se celebra el once de noviembre.

La soltería se ha convertido en un estado vinculado al empoderamiento de la mujer y ha dado lugar a un fenómeno llamado “sologamia”. Esta nueva práctica, consistente en casarse con uno mismo, ya ha sido llevada a cabo por algunas personas, como es el caso de Chen Wei-yih, una taiwanesa que obligada por la presión que hay en su país por el matrimonio antes de cumplir los 30 años, decidió casarse consigo misma hasta encontrar el hombre adecuado.

En el día de San Valentín, Psique dice adiós a Cupido y lo sustituye por el estandarte de la soltería: ella misma.