Modernos pero infelices

Varios libros y blogs parodian el estilo de vida idealizado que venden los catálogos de moda e interiorismo.

Unhappy hipsters

Gary y Elaine son la clase de pareja que compra jaulas de pájaros gigantes de los años veinte en los mercadillos y les introduce una pila de libros antiguos para crear una especie de instalación. Gary y Elaine son el tipo de personas que en un momento te monta un centro de mesa alternativo utilizando un cactus, una estrella de mar y un par de polaroids antiguas. Gary y Elaine no existen. Son producto de la imaginación de la cómica Molly Erdman, que creó el blog Catalog Living, dedicado a imaginar con mordacidad la vida de la gente que ...

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Gary y Elaine son la clase de pareja que compra jaulas de pájaros gigantes de los años veinte en los mercadillos y les introduce una pila de libros antiguos para crear una especie de instalación. Gary y Elaine son el tipo de personas que en un momento te monta un centro de mesa alternativo utilizando un cactus, una estrella de mar y un par de polaroids antiguas. Gary y Elaine no existen. Son producto de la imaginación de la cómica Molly Erdman, que creó el blog Catalog Living, dedicado a imaginar con mordacidad la vida de la gente que vive en los catálogos de decoración. Time lo escogió como uno de los mejores blogs de 2011 y ahora incluso se publican sus mejores entradas en forma de un libro titulado Catalog living at its most absurd (Plume) o "La vida de los catálogos llevada al absurdo". La web tiene incluso una especie de spin-off, una columna titulada Magazine Living (vivir como en las revistas) que se publica en la web Curbed.com. 

"Cuando te mueras, a la gente no le va a preocupar qué hiciste o si tus hijos fueron a la universidad. De lo que se acordarán es de si sabías doblar las servilletas en plan origami, si tus toallas de algodón pima llevaban bordadas las iniciales de tus invitados o de si la comida que servías hacía juego con tus paredes", escribe la ficticia Elaine en el prólogo. 

«El cuadro se convirtió en un triste recordatorio del destino que nunca alcanzarían como pareja».

Unhappy hipsters

Catalog Living es tan sólo una de muchas iniciativas que han surgido en los últimos años que parodian las prescripciones de estilo de vida. Unhappy Hipsters (Modernos infelices) lleva años satirizando las vidas imaginarias de los habitantes de las casas irreales que vemos en las revistas y también dio lugar a un libro. El blog toma imágenes de distintas publicaciones y las postea con hilarantes pies de foto. Hay algo en la contraposición entre esos insteriores irreprochables y las sombrías fiiguras que los habitan en las fotos que invita a imaginárselos envueltos en una inevitable melancolía. De hecho, el subtítulo del libro, publicado el año pasado por Chronichle, es "se está muy solo en el mundo moderno". Y en la introducción se asegura: "Ser un moderno de verdad requiere mucho más que disciplina, visión y estar dispuesto a tener una cocina sin armarios (…) Los lectores aprenderán a distinguir entre distintos acabados de hormigón, todas las sombras del plywood y cómo accesorizar con niños y mascotas". 

El tumblr Fuck Your Noguchi Coffee Table es, como su nombre indica, como el exabrupto que uno dirigiría a un conocido demasiado interesado en hablar de su casa perfecta y de cómo se le ocurrió reconvertir una antigua escalera de pintor en la base para una estantería exquisitamente rústica. Ahí también se postean fotos de interiores de gusto inapelable, acompañados de pies de foto tienen el mismo enunciado agresivo: Que le den a tus mesita de café Noguchi, que le den a tus asientos reciclados de un cine antiguo, que le den a tu falsa taxidermia, que le den a tu poster tipográfico…y en esa línea.

Felicidades (ejem) por tu mesita Noguchi, tu silla Eames, tu conjunto de marcos ‘vintage’…

Fuck Your Noguchi Coffee Table

También hay webs especializadas en ridiculizar a una marca en concreto.  Anthroparodie les da la vuelta a los catálogos de Anthropologie, una cadena estadounidense de ropa y decoración con un estilo muy particular de caro y falso vintage que ya era Pinterest-friendly antes de que existiera Pinterest. Al cliente de la firma no le importa gastar 300 euros en una colcha de patchwork, siempre y cuando ésta tenga el aspecto de haber sido adquirida por 20 en un mercadillo ignoto y no en una de las más de 150 tiendas de la cadena.

En la web Jezebel también cuentan con una sección fija dedicada a comentar los catálogos de varias firmas, y sienten especial debilidad por el  hipsterismo ilustrado de Urban Outfitters y por el estilo preppy colorido de J.Crew.

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