Ana Rujas y Bàrbara Mestanza, dos autoras fuera de los cánones
Las actrices y escritoras reflexionan sobre los estereotipos en ‘La mujer más fea del mundo’, que podrá verse en las Naves del Español.
Todo empezó en Nueva York hace tres años, una noche de confesiones entre dos compañeras de piso y profesión. Ana Rujas y Bàrbara Mestanza se sinceraron, se vaciaron y así nació La mujer más fea del mundo. “Surgió de una gran mala época de las dos; yo tuve una depresión y Ana tampoco estaba muy fina. Vimos que había que hablar en plata, poner sobre la mesa las inquietudes, dolores y miedos de las mujeres jóvenes del siglo XXI”, explica Mestanza. Ella dirige la autoficción que Rujas interpreta y ambas escribieron y estrenaron en 2019. Ahora, del 11 a 16 de mayo, vuelve a escena en las ...
Todo empezó en Nueva York hace tres años, una noche de confesiones entre dos compañeras de piso y profesión. Ana Rujas y Bàrbara Mestanza se sinceraron, se vaciaron y así nació La mujer más fea del mundo. “Surgió de una gran mala época de las dos; yo tuve una depresión y Ana tampoco estaba muy fina. Vimos que había que hablar en plata, poner sobre la mesa las inquietudes, dolores y miedos de las mujeres jóvenes del siglo XXI”, explica Mestanza. Ella dirige la autoficción que Rujas interpreta y ambas escribieron y estrenaron en 2019. Ahora, del 11 a 16 de mayo, vuelve a escena en las Naves del Español.
“Cuando estuve en Nueva York no fue lo que me imaginaba, me encontré con mucha soledad, toqué fondo. A veces está bien que la situación te haga vomitar todo lo que tienes que sacar”, reconoce Rujas. Bajo los focos, habla de insatisfacción, estereotipos, drogas, anorexia, consumismo. “El recorrido del personaje es parecido al mío, es actriz y modelo. Queríamos abrazar nuestra fealdad a través de una catarsis, plantear la pregunta de si el cuerpo físico determina nuestra felicidad o no”.
Entienden el teatro como activismo, dicen que una obra tiene que atravesar al espectador. Ellas son un ejemplo de las nuevas voces que plantean otros temas en la ficción: Rujas prepara Cardo con Claudia Costafreda, una serie producida por los Javis en la que ahonda en el tema de la belleza femenina, y Mestanza estrena el 5 de mayo en el Teatro de La Abadía Sucia, una obra sobre los abusos sexuales. Para ella es importante cambiar los cánones: “Llevamos tantos siglos de cultura creada por hombres, con historias vistas y contadas por y para ellos, que cuando nosotras empezamos a legitimar nuestros puntos de vista se ve como algo del momento, circunstancial. Pero no somos una moda, sino una realidad”.
Sus recomendaciones teatrales
Angélica Liddell
Rujas y Mestanza coinciden en que Liddell es un referente. “Nunca hace nada estándar ni convencional”, apunta Rujas, mientras Mestanza invita a leer su libro Guerra interior (Ediciones Uña Rota). “Sus textos tienen mucha poética a la vez que golpean y dan palizas”, reflexiona.
‘Curva españa’
Esta pieza de Chévere, compañía Premio Nacional de Teatro 2014, es uno de los últimos montajes que ha visto Rujas. “Me encantó porque es humilde, sencilla, con unos actores entregados y contada con gran honestidad”, explica. También recomienda ver Atraco, paliza y muerte en Agbanäspach, de Nao Albet y Marcel Borràs.
Fran Cuéllar
Bàrbara Mestanza opina que, dentro de la escena teatral actual, “Fran Cuéllar es un autor muy interesante”. También destaca el trabajo de Nazario Díaz y, como Ana Rujas, está interesada en las propuestas de Rodrigo García.