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15 juegos de mesa para recuperar en Navidad

Las reuniones familiares no tienen por qué ser un sopor. Estos aliados nunca fallan.

Asúmelo, la guerra por los quesitos es una de las batallas más entretenidas en las reuniones familiares. Por eso el Trivial Pursuit (edición Genus) nunca falla. 4.800 preguntas dan para muchas horas de juego.
Jugar a Operación después del orujo y otros licores de sobremesa es un desafío. Hagámoslo por John Spinello, el inventor que este año recurrió al crowdfunding, ironías del destino, para recaudar 25.000 dólares para poder pagarse una operación. Lo consiguió.
¿Pulpo como animal de compañía? Venga va, lo aceptamos porque el scattergories es tuyo y si no te lo llevas. Si eres ágil mentalmente, este es tu juego.
Si te van los juegos de mesas de estilo alemán lo tuyo son Los colonos del Catán. Porque no sólo los Sims construyen ciudades, pueblos y caminos.
¿Es pelirroja? ¿Lleva gafas? ¡Susan! El quién es quién nunca falla.
¿Quién asesinó al Dr. Negro, con qué arma y en qué habitación? Los amantes del misterio saben que estamos hablando de Cluedo.
Tres islas (selvática, desértica y glacial). Una cuarta isla. La fortaleza. Guerreros. Fuezas. El oráculo. El imperio cobra marcó los 80. Si lo conservas, deberías pasar el testigo para que las nuevas generaciones sepan que hay vida más allá del Angry Birds.
Algunos lo prefieren al Monopoly: si te suena Fujiyama, Waikiki y los coches como fichas, lo tuyo es Hotel. El juego para empresarios de espíritu con ánimos de forrarse construyendo imperios hoteleros.
B5- Agua/ D7 Tocado. Hundir la flota, o cómo montar batallas navales desde la mesa de tu casa.
Se recomienda jugar a Jenga después de las copas de rigor. Hará falta buen pulso y autocontrol para que esos 54 bloques de madera resistan.
Saca el artista que llevas dentro con uno de los clásicos de la sobremesa navideña: Pictionary.
Por muy tediosa que sea tu reunión familiar, no hay aburrimiento insufrible que no pueda levantar un Bingo.
Alberto Garzón es fan, ¿y tú? No dejes que tus bajas pasiones te delaten, recuerda que solo es un juego de mesa. Es Risk.
Lo de jugar al Apalabrados en el baño hay que superarlo. Jugar al Scrabble en la mesa también merece la pena.
Es nara... Meeeeeec. Lleva bigot... Meeeeec. Si te van los gritos y el alboroto jugando, lo tuyo es Tabú.