Qué gusto da viajar cuando se va en el tren vestida de Louis Vuitton
Marc Jacobs monta una estación de ferrocarril para presentar la nueva y pesada colección de Louis Vuitton.
Puede parecer y parece que para esta colección de Louis Vuitton, Marc Jacobs ha fusionado su colección de otoño-invierno 2012/13 presentada hace unas semanas en Nueva York con una pizca de Prada robándole la escenografía de estación de ferrocarril a John Galliano, aunque en su caso, el tren se movía por raíles de verdad. Pero hasta que ...
Puede parecer y parece que para esta colección de Louis Vuitton, Marc Jacobs ha fusionado su colección de otoño-invierno 2012/13 presentada hace unas semanas en Nueva York con una pizca de Prada robándole la escenografía de estación de ferrocarril a John Galliano, aunque en su caso, el tren se movía por raíles de verdad. Pero hasta que se demuestre lo contrario, la inspiración y los referentes no son propiedad privada.
No hace falta ser Agatha Chistie para captar que en el Vuitton Express las protagonistas no son las pasajeras sino los maleteros. Esos señores que portan en sus manos la verdadera máquina de hacer dinero: los bolsos en todas su variedades y formas.
Como buenas expedicionarias no precisamente low cost, las estrafalarias mujeres Vuitton se llevan la casa a cuestas, esto es, en sus valijas hay sitio suficiente para amarse looks capa sobre capa de mínimo cuatro prendas. Bajo sus faldas midi asoman pantalones tobilleros, y sobre estos, vastos chaquetones o abrigos más guantes y sombreros.
No se apean tampoco estas turistas cero accidentales del print caleidoscópico y el efecto arcoíris que hacen los cristales marquetados sobre vestidos o piratas. Y es que más de una parada técnica se necesita para hacer acopio de rasgos tan ricos como la pasamanería de las faldas tipo kilt o las aplicaciones de terciopelo y seda en colores joya.
Ojo también a los zapatos: no aptos para ningún tipo de trasbordo.
Imaxtree