Sirenas, palabras de honor y nudes: las tendencias de las estrellas
Una noche fundida en negro con pinceladas multicolores.
Pongamos que los Globos de Oro son como las bodas: algo nuevo, algo viejo, algo prestado y casi siempre algo azul. En este caso repartido entre el aguamarina, el cobalto y rozando el violáceo. Verde esmeralda, tal y como adelantaran los Critic's Choice Awards, amarillo o rojo, han sido de los tonos más vistosos en un mural pintado a brochazos de tintes tan repartidos como aislados. Se confirma que los nude, esa gama que va del beis al rosa empolvado p...
Pongamos que los Globos de Oro son como las bodas: algo nuevo, algo viejo, algo prestado y casi siempre algo azul. En este caso repartido entre el aguamarina, el cobalto y rozando el violáceo. Verde esmeralda, tal y como adelantaran los Critic's Choice Awards, amarillo o rojo, han sido de los tonos más vistosos en un mural pintado a brochazos de tintes tan repartidos como aislados. Se confirma que los nude, esa gama que va del beis al rosa empolvado pasando por el perla, son el nuevo negro en este tipo de eventos. Y el otro negro, el clásico, ha reverdecido este año gracias al Nina Ricci de Rooney Mara, el Dior de Mila Kunis y el Chanel Alta Costura de Julianne Moore, aunque como más distinguido se ha mostrado es combinado con blanco al estilo de Claire Danes y Kate Winslet.
El nude se mantiene.
Cordon Press
Escasa de volumen, volantes, transparencias y ornamento en exceso (salvo por las chicas Glee: entre ambas han combinado todas las técnicas y acabados posibles, o Elle MacPherson) ha estado una alfombra roja cuyo dramatismo se ha concentrado eminentemente a los pies de las actrices, en la silueta sirena más o menos literal de la mayoría de sus vestidos. Unos diseños cuyos escotes se han prorrateado entre el palabra de honor y las exageradas aberturas en uve que han bordado, orillando la grosería, desde Evan Rachel Wood a Emma Stone pasando por Charlize Theron. Contadas han sido esta vez las asimetrías y una edición más ha proliferado (véanse Meryl Streep, Jessica Biel, Michelle Williams, Tilda Swinton, Helen Mirren o Julianna Margulies) la manga larga.
En general se ha brillado en su justa medida (al estilo Nicole Richie, Andy MacDowell o Diane Lane, todas metalizadas en plata y oro) y en la quiniela de diseñadores, además de Zac Posen, el pastel se ha repartido entre Gucci, Monique Lhuillier o Marchesa.
Silueta sirena para todas.
Cordon Press