S MODA PARA ULÉ

Este es el secreto para proteger y regenerar tu piel de forma natural (mientras cuidas el planeta)

El cuidado de la piel a través de elementos naturales y mínimo impacto medioambiental es el ‘leitmotiv’ de Ulé, iniciativa cosmética que nace con el apoyo de Shiseido.

La belleza es resiliencia. La naturaleza nos lo muestra en numerosas ocasiones, especialmente en el mundo vegetal: la capacidad para regenerarse es la clave que hace que unos organismos florezcan mientras otros se marchitan. Este principio de unión con lo natural está en el corazón de Ulé, la firma de cosmética que protagoniza un cambio consciente dentro de su industria desde el mismo concepto de belleza. Ulé, que viene del griego antiguo Hylé, la materia fundamental de todo, entiende esa belleza como un bienestar placentero, tanto para uno mismo como para los demás y su entorno.

Ulé nace de la mano de Lindsay Azpitarte, responsable durante más de dos décadas de las marcas del grupo Shiseido en Europa, y parte de una visión: un cuidado de la piel más eficaz debía partir de un enfoque consciente de la naturaleza. Para conseguirlo, Ulé se basa en ingredientes naturales, siendo la primera marca de cosmética que integra los cultivos verticales en su ADN. Utilizar este tipo de técnica para conseguir sus materias primas no solo asegura que sean de primera calidad, sino que también es más sostenible al minimizar su huella de carbono.

Lindsay Azpitarte, fundadora de Ulé.

Con este punto de partida, Azpitarte presentó su proyecto al grupo Shiseido, que decidió respaldarlo y apoyarlo a través de su departamento de tecnología e innovación. Así, Azpitarte formó un equipo que incluía un etnobotánico, un nutricionista y especialistas en innovación en belleza, y Ulé se hizo realidad en 2022.

Enfoque eco-consciente

Al igual que las plantas, la piel tiene la capacidad de regenerarse. De hecho, es uno de los órganos más resistentes del cuerpo, capaz de resistir a grandes cambios de temperatura y entornos diferentes. Cuidarla de la manera más natural y aportar los elementos que le ayuden a esa regeneración es la base de la filosofía de Ulé. Para ello, se basa en tres pasos, proteger, regenerar y desestresar.

El origen de sus fórmulas reside en sus cultivos verticales, en los que crecen los botánicos frescos que utilizan. Con un cuidado proceso de crecimiento, las plantas se utilizan en su totalidad para aprovechar mejor sus propiedades beneficiosas. Entre otras, se cultivan semillas de Tulsi y esquejes de Cóleo y Centella. Una vez recolectadas, Ulé utiliza un proceso de doble extracción patentado que garantiza que se obtengan todas las moléculas beneficiosas de los botánicos.

La primera extracción se realiza de manera ecológica, sin disolventes y sin generar residuos. Cada una de las plantas sigue este proceso por separado y los jugos activos se mezclan después en partes iguales. La segunda extracción se realiza a través de los residuos vegetales generados y de nuevo por separado.

De esta forma, los productos de Ulé pueden presumir de utilizar fórmulas clean y veganas, certificadas por el organismo Biorius, sin presencia de ninguno de los 2.700 ingredientes marcados como prohibidos por sus estándares de calidad, y con ingredientes 100% trazables. Ese compromiso con la naturaleza de Ulé se plasma tanto en su interior como en su exterior: todos sus envases son de vidrio reciclado o estirado, lo cual reduce su peso, y sus tapas tienen origen biológico, desde virutas de madera a fibras vegetales.