Está pasando: los zapatos de punta cuadrada son tendencia (más allá de Bottega Veneta)
La marca italiana, junto con Balenciaga, lanzó el órdago de la temporada: lo apostaron todo a la punta cuadrada… ¿acertaron?
Echemos la vista atrás unos cuantos años. Hacía poco que habíamos estrenado el milenio y pese a todos los temores, todo pareció quedarse como estaba. O casi todo. En cuestiones de moda pasamos del minimalismo de los 90 a un cierto exceso en forma de pantalones a la cadera, tops halter que dejaban a la vista el ombligo y colores neón. Los zapatos alargaron su punta hasta el infinito para poder asomar por los bajos acampanados. Y entre todos estos experimentos de nuevas e im...
Echemos la vista atrás unos cuantos años. Hacía poco que habíamos estrenado el milenio y pese a todos los temores, todo pareció quedarse como estaba. O casi todo. En cuestiones de moda pasamos del minimalismo de los 90 a un cierto exceso en forma de pantalones a la cadera, tops halter que dejaban a la vista el ombligo y colores neón. Los zapatos alargaron su punta hasta el infinito para poder asomar por los bajos acampanados. Y entre todos estos experimentos de nuevas e imposibles siluetas apareció la tendencia que nos ocupa: la de los zapatos de punta cuadrada. Normalmente acompañaban a la sandalia de tiras finas, lógica evolución de la década anterior, y también a la otra nueva sensación, las chanclas con tacón.
No hubo diva de los 2000 que no los llevara, desde Britney Spears hasta Victoria Beckham, pasando por Gwyneth Paltrow. Entre sandalias de plataforma, zapatos puntifinos y chanclas con tacón, ahí estaban ellos, el calzado de acabado más original. Una horma habitualmente difícil de encajar y cuyo resultado no terminaba de convencer a todo el mundo, ¿sería una de aquellas modas que pasarían a mejor vida? En cuestiones de estilo ya se sabe que es mejor no renegar de forma tajante de las tendencias por muy locas que estas sean porque tienen la costumbre de alcanzarnos de nuevo. Y así es como volvemos a 2019.
Bottega Veneta presentó en su colección para este otoño-invierno un diseño de zapatos diferente al de la mayoría. Su gran apuesta fue la de rescatar la punta cuadrada. Balenciaga fue de los pocos que le acompañó en su andadura presentado algún que otro modelo. ¿Estaría el gran público preparado para calzarse de nuevo la punta cuadrada? El mercado demostró que sí. La prueba definitiva fue cuando, a finales de verano, pudimos ver en Zara los primeros modelos con este acabado. Sandalias de cordones finos y mules en colores neón. Una llamada a la nostalgia a la que era difícil resistirse. Las insiders de la moda no tardaron en dar la réplica y las semanas de la moda de septiembre y octubre se llenaron de botines, sandalias y zapatos de punta cuadrada.
Ya no son solo dos marcas aisladas en las que podemos encontrar este tipo de zapato, ahora el mercado nos ofrece un sinfín de opciones. Desde las más asequibles, hasta las de gran lujo, pasando por esas marcas desconocidas para el gran público.
En Yves Saint Laurent, por ejemplo, verás que todos sus zapatos de salón son de punta fina. Sin embargo, para su propuesta más nocturna, la de las sandalias, la firma francesa opta por la punta cuadrada que tiende a acortar, visualmente, la longitud del pie.
Prada tiene prácticamente todos los acabados, desde la punta redondeada, hasta la más fina y tampoco se olvida de esta tendencia que viene pisando fuerte, incluyendo en su catálogo un modelo de zapatos de charol con pulsera al tobillo y unas botas altas con la punta cuadrada.
También las marcas nicho se han sumado a esta tendencia. El tándem de gallegos que conforma Miista, una de las zapaterías afincada en Londres con más éxito, ha hecho de esta punta cuadrada el puntal de su colección. No en vano, sus zapatos tienen lo vintage como seña de identidad. En su colección encontramos una gran variedad, desde botines, hasta zapatos de cordones planos tipo Oxford, mules y zapatos de salón.
La americana By Far, una de las favoritas de Kendall Jenner y las hermanas Hadid, está especializada en revisitar los 90 por lo que la punta cuadrada no podía faltar en su catálogo. También aquí verás un montón de opciones en todas las formas y colores.
La española Mercedes Castillo afincada en Nueva York, propone desde su firma, estilosas sandalias bicolor con este acabado, mules doradas o sandalias joya para darles a tus looks de noche ese toque diferente que da la punta cuadrada.
Y si buscas algo minimal, en la británcia Neous, encontrarás todo tipo de sandalias y mules que cumplen con la nueva tendencia.
En cuanto a las firmas low-cost, también la mayoría de ellas introducen alguna que otra opción con punta cuadrada. En Zara, verás todo tipo de calzado, desde botines, hasta sandalias con esta peculiar forma y con la que ya comprobó su buena aceptación a finales de verano. Lo mismo que Mango, con botas altas con estampado de serpiente, otra gran tendencia de principios de los 2000 rescatada o, para la noche, sandalias de tiras.