Las tres cosas que Lena Dunham quiere explicarle al mundo sobre las tallas grandes
La actriz y escritora se ha aliado con la firma de tallas grandes 11 Honoré para crear una colección que represente de verdad las necesidades de las mujeres ‘curvy’.
En plena promoción de algunos de los grandes éxitos que ha cosechado en la última década, Lena Dunham se percató de lo que ella considera un agujero en el mercado: la escasez de ropa de talla grande estilosa y bonita. Lo que no sabía es que detrás de los cabreos que se llevaba por los envíos de ropa equivocada (marcas que pensaban que podía entrar en una talla que no le servía) y de todo el bullying recibido por sus elecciones de alfombra roja iba a surgir la idea de crear una colección que le iba a despojar de todas esas preocupaciones. Así es cómo la actriz, guionista, productora, e...
En plena promoción de algunos de los grandes éxitos que ha cosechado en la última década, Lena Dunham se percató de lo que ella considera un agujero en el mercado: la escasez de ropa de talla grande estilosa y bonita. Lo que no sabía es que detrás de los cabreos que se llevaba por los envíos de ropa equivocada (marcas que pensaban que podía entrar en una talla que no le servía) y de todo el bullying recibido por sus elecciones de alfombra roja iba a surgir la idea de crear una colección que le iba a despojar de todas esas preocupaciones. Así es cómo la actriz, guionista, productora, escritora y pionera de las newsletters puso en marcha su colección 11 Honoré x Lena Dunham, en la que presume de crear «piezas con telas de lujo y de calidad cortadas siguiendo todas las maestrías de la costura para que resulten cómodas y favorecedoras».
En la web de la firma con la que ha creado la colección seleccionan también prendas de talla grande de otras marcas y publican Page 11, la parte más editorial del proyecto en la que dan voz a los protagonistas que trabajan y siguen el universo más aspiracional de la moda de talla grande. En resumen, 11 Honoré, es el NET-A-PORTER de las tallas grandes.
En una entrevista que ha concedido a The New York Times, Dunham le ha contado a Vanessa Friedman que lo único que ha hecho es utilizar su propia experiencia e inspirarse en su propio cuerpo para crear la idea de la colección. «Tengo mucha barriga, siempre la he tenido, es donde gano mucho peso». Para Dunham el problema es que la diversidad que se vende en los medios y en las redes sociales no es la real y es por eso que existe ese gran agujero en el mercado de este tipo de ropa. Estas son las lecciones sobre tallas grandes que ha querido enseñar al mundo con este proyecto y que ha señalado con mucha lucidez en su entrevista con Friedman:
1. La realidad nunca se parece a la ficción de las celebrities
«Lo que es complicado en el universo del body positive es que realmente hay muy poca gente con el tipo de cuerpo que la gente siente como ‘positivo’. Queremos curvas, pero como las de Kim Kardashian. Queremos grandes culos y grandes tetas, pero no queremos celulitis y exigimos caras que podrían encajar en el cuerpo de una mujer delgada». Para Dunham, estos supuestos cuerpos curvy no son la realidad que viven las mujeres de talla grande y por eso muchas veces estas personas no encuentran la ropa que les sienta bien.
2. Las mujeres con talla grande también son sofisticadas
Una de las cosas que quiere expresar con su colección es que las mujeres curvy también aman la moda y tienen estilo. «No se hace mucha ropa sofisticada para las mujeres con talla grande, tampoco hay ese juego y esa inteligencia que ofrece la moda, ni siquiera hay sentido del humor y cuando lo hay es vamos a poner un melón en esta falta de chica descarada».
3. Hacer ropa de talla grande no significa poner más tela
Dunham reprocha a los diseñadores que muchas veces han pensado que hacer ropa para tallas grandes pasa simplemente por ponerle más centímetros de tejido. La actriz y escritora demanda que las piezas se corten pensando realmente en el cuerpo que las va a lucir. «Si tú quieres que una pieza siente bien en un cuerpo con barriga, con un culo grande y con unos brazos que sudan cuando hace calor tienes que cortarlo pensando en todo esto, no solo poner más trozo de tela».
Lena Dunham ha pasado durante los últimos años por varios estados físicos diferentes y ha utilizado sus redes sociales en muchas ocasiones para hablar sinceramente sobre sus pérdidas y ganancias de peso. “A la izquierda: 62 kilos, recibiendo piropos todos los días, pretendida por muchos hombres y siendo portada de una publicación sobre dietas que funcionan. También, enferma de cuerpo y mente y subsistiendo solo con pequeñas cantidades de azúcar, toneladas de cafeína y una farmacia de bolsillo”, llegó a decir sobre su ‘yo’ delgada en Instagram en 2018.
11 Honoré x Lena Dunham no es el único paso hacia la diversidad real que hemos visto en los últimos meses. Alber Elbaz presentó en el marco de la semana de la moda de París el pasado enero AZ Factory, un proyecto de moda democrática con un abanico de tallas que van desde la XXS hasta la XXXL. «¡Conozco a muchas mujeres que van a la sección infantil a comprar vestidos! Este es un proyecto que busca dar soluciones a las mujeres con todo tipo de cuerpos y de tallas», subrayó Elbaz en la presentación de la colección. El propio diseñador ha manifestado en público sus inseguridades por su peso y ha asegurado que empatiza mucho con las mujeres que sienten presión por agradar con su talla. «Vivimos en un mundo en el que hay muchos likes, pero poco amor por nosotros mismos: tenemos que empezar a decir esta es mi talla y me encanta», declaró a Tatler.