¿Hará TVE el programa de moda que estábamos esperando?
‘Maestros de la Costura’ llega dispuesto a encontrar el nuevo talento del diseño español. 12 candidatos serán valorados por un jurado en el que no podía faltar Palomo Spain. El reto: acercar la moda al público general sin caer en la parodia.
El nuevo talento de la moda española está ahí fuera y Maestros de la Costura llega dispuesto a encontrarlo. Al menos, ese es el planteamiento del nuevo programa de RTVE. La noticia del estreno (aún sin fecha confirmada) resulta alentadora por dos motivos: primero porque la falta de contenidos de moda en la televisión es fragante (Flash Moda es probablemente la única referencia que podemos citar) y, segundo, porque entre el jurado se encuentra Palomo Spain (Alejandro Palomo), el diseñador que ha insuflado un soplo de aire fres...
El nuevo talento de la moda española está ahí fuera y Maestros de la Costura llega dispuesto a encontrarlo. Al menos, ese es el planteamiento del nuevo programa de RTVE. La noticia del estreno (aún sin fecha confirmada) resulta alentadora por dos motivos: primero porque la falta de contenidos de moda en la televisión es fragante (Flash Moda es probablemente la única referencia que podemos citar) y, segundo, porque entre el jurado se encuentra Palomo Spain (Alejandro Palomo), el diseñador que ha insuflado un soplo de aire fresco a la industria con sus diseños masculinos alérgicos a los estereotipos y ha logrado vestir a la mismísima Beyoncé. Y no solo él: María Escoté –que cuenta con Miley Cyrus y Katy Perry entre sus clientas– y Lorenzo Caprile –con más de tres décadas de experiencia como diseñador y figurinista a sus espaldas– conforman el jurado. La tríada, con Raquel Sánchez Silva al frente como presentadora, valorará el trabajo de los 12 aprendices hasta que uno consiga convertirse en la nueva promesa del diseño nacional.
Maestros de la Costura será la adaptación de The Great British Sewing Bee, el talent show que emite la BBC desde hace cuatro temporadas. Tras pasar por Francia, Alemania, Noruega, Dinamarca y Suecia, llega a España de la mano de Shine Iberia, la misma productora responsable del éxito de Masterchef. Este dato es relevador para intentar imaginar qué podemos esperar del espacio, que probablemente replique el estilo del famoso programa de cocina. Es decir, que nadie espere un hollywoodiense alo Project Runway (el concepto es el mismo pero el despliegue mayor). Maestros de la Costura tiene todas las papeletas para convertirse en una cita familiar, que otorgue (casi) tanto protagonismo a los diseños como a las historias personales y los retos de los concursantes. Quizá en su casting se cuelen algunos estereotipos (la ama de casa que lleva toda la vida cosiendo o la historia de superación de un diseñador al que su familia jamás apoyó), pero lo importante es que la moda pueda convertirse en tema de conversación para una audiencia heterogénea y ajena a la industria. Masterchef –uno de los líderes de la parrilla con 3 millones de espectadores en la edición Celebrity que está en antena– ha logrado poner de moda la cocina. Joan Roca, Diego Guerrero o Eneko Atxa han entrado a formar parte del imaginario de la gente de a pie, que quizá jamás pise un estrella Michelín, gracias al programa. Si Maestros de la Costura consiguiera situar en la conversación nacional nombres como Josep Font (al frente de Delpozo), Moisés Nieto (Premio Nacional de la Moda 2017) o el propio Palomo Spain (nominado al prestigioso LVMH Prize), ya habrá merecido la pena.
El reto estará en producir un auténtico talent show sin convertirlo en un reality show. Los escasos ejemplos de programas relacionados con la moda pecan, precisamente de lo segundo. Cámbiame, en Telecinco, premia las historias personales de los concursantes perpetuando el manido mito de patito feo convertido en cisne. Se cuelan algunos consejos de estilismo básico y el discurso se salpica con el nombre de algún que otro diseñador o marca, pero en el fondo no es un programa de moda. Quiero Ser, el batacazo televisivo de Sara Carbonero, se convirtió en una caricatura de algo muy alejado de la moda y alimentó la mofa, los memes y la injusta fama de «industria hueca» en las redes sociales. El desafío de Maestros de la Costura será entretener (esto es televisión) sin caer en la ridiculización, la frivolidad o el chiste.
«El programa busca poner en valor los oficios de la industria textil mostrando el proceso entero de elaboración de prendas de vestir. Tiene como vocación recuperar la artesanía de la moda desde la televisión, a la vez que contribuir a reforzar una de las principales industrias de nuestro país», adelantan desde TVE. Al casting se han presentado más de 10.000 aspirantes que llevaron prendas confeccionadas por ellos mismos. En la cuenta de Instagram @maestrosdelacostura se acumulan 39 publicaciones que inmortalizan algunas de las propuestas de los candidatos. Un vestido de novia creado por el incipiente diseñador Felipe Díaz coexiste con un traje de flamenca elaborado por una señora sevillana. Una pequeña muestra de lo que veremos en el aire: distintos estilos, perfiles, edades y, a buen seguro, una dosis extra de volantes y sabor español. Pero, ¿no es eso precisamente lo que ha llevado a Palomo Spain a desfilar en Nueva York?