6 razones por las que Margot Robbie ha devuelto la frescura a la alfombra roja
Las apariciones de la actriz, orquestadas por la estilista más influyente de Hollywood, se han ganado el aplauso de la crítica. La australiana, joya de la corona del poderoso estudio Warner Bros, sabe como arriesgar (y ganar).
«Antes de que acabe el verano, os habréis cansado de mí», afirmaba irónica en esta entrevista a El País. El temor de Margot Robbie a resultar empalagosa está justificado: la actriz, que protagoniza La leyenda de Tarzán y Escuadrón suicida, aparece un día sí y otro también en los medios de todo el mundo. Es su momento. Hace tres años nadie la conocía y, tras su paso por El lobo de Wall Street como la mujer del personaje interpretado Leonardo DiCaprio, no ha parado....
«Antes de que acabe el verano, os habréis cansado de mí», afirmaba irónica en esta entrevista a El País. El temor de Margot Robbie a resultar empalagosa está justificado: la actriz, que protagoniza La leyenda de Tarzán y Escuadrón suicida, aparece un día sí y otro también en los medios de todo el mundo. Es su momento. Hace tres años nadie la conocía y, tras su paso por El lobo de Wall Street como la mujer del personaje interpretado Leonardo DiCaprio, no ha parado. La australiana se ha convertido en la joya de la corona del poderoso estudio Warner Bros que, además de estar detrás de sus últimos papeles, ahora también producirá Queen of the air. La crítica de cine la sitúa como una de las promesas más interesantes de Hollywood (la veremos también en Goodbye Christopher Robin y ya tiene varios papeles más confirmados) y la de moda como un soplo de aire fresco sobre la alfombra roja. Analizamos los motivos por los que brilla en sus tour de promoción y por los que, a pesar de su omnipresencia, todavía está lejos de cansarnos:
1. Arriesga (y acierta)
No todo el mundo puede colocarse un vestido con un unicornio gigante de lentejuelas doradas y salir airoso. Margot Robbie, sí. Lejos del aburrimiento de las muchas actrices que van impecables a fuerza de no arriesgar absolutamente nada, la protagonista de Escuadrón Suicida está demostrando que forma parte del reducido grupo de elegidas que pueden ponerse casi cualquier cosa (por llamativa o complicada que sea) y estar perfectas. El vestido-unicornio de Sarah Burton para Alexander McQueen se ha convertido en uno de los looks más comentados de las últimas semanas y en prueba irrefutable de que la australiana está dispuesta a salirse de su zona de confort y dar alegrías en la alfombra roja. Durante su recorrido por el mundo presentando sus dos últimas películas, La leyenda de Tarzán y Escuadrón Suicida, también se ha atrevido con puños de pelo rosa o coloridos estampados felinos.
2. Sabe que no hay mejor alianza que Gucci
Alessandro Michele firma varios de sus mejores looks. Robbie sabe la importancia de vestir la firma más venerada del momento para meterse a la industria de la moda en el bolsillo. Lo mismo se atreve con un vestido de inspiración oriental, que con un diseño floral con la mítica lazada al cuello. Cada estilismo firmado por la casa italiana es un acierto y sinónimo de acaparar titulares. Llevar el vestido blanco con el ya icónico tigre en el pecho ha sido decisivo para afirmar que sus apariciones son las más apetecibles y refrescantes del verano.
3. Sorprende vistiendo diseñadores desconocidos para el gran público
Llevó un vestido blanco con estampado de cerezas de HVN, la firma de la modelo y dj británica Harley Viera-Newton. Causó sensación con un diseño con escote Bardot y estampado de rayas firmado por Rosetta Getty, la marca creada por la exmodelo y mujer del actor Balthazar Getty que todo Hollywood quiere llevar. Uno de los puntos fuertes del armario de la actriz es el de confiar en diseñadores poco conocidos fuera del circuito de la moda y apostar por las nuevas firmas que están conquistando a los entendidos. Por ejemplo, en la Comic-Con eligió un vestido de Monse, la enseña de raíces asturianas que se ha convertido en favorita de la crítica y de las celebrities que buscan diseños originales. En una de sus últimas apariciones se marcó otro acierto de la mano de un abrigo a rayas diseñado por Brock Collection, la casa neoyorquina que defienden iniciadas como la bloguera Man Repeller o la mismísima Rihanna. Estos nuevos nombres la hacen más interesante y marcan la diferencia respecto a las colegas de profesión que no van más allá de los creadores más asentados de las pasarelas.
4. Tiene a la mejor estilista de Hollywood
No es de extrañar el éxito de sus apariciones si tenemos en cuenta que son orquestadas por Kate Young, la estilista más influyente del año según la lista publicada por Hollywood Reporter. Young, que ya se había ganado el primer puesto en el ranking en otra ocasión, es la responsable del aplaudido cambio de estilo de Selena Gomez (sí, también de su comentada mezcla de chándal con tacones) y está detrás del éxito sartorial de Sienna Miller o Dakota Johnson. Su paso por la edición estadounidense de Vogue, sus colaboraciones con grandes cabeceras y su labor como estilista en los desfiles de firmas como Nina Ricci o Jason Wu avalan su trabajo y la colocan como una de las personalidades más influyentes a la hora de determinar qué se lleva y qué no. Lo que dice Young va a misa. Y lo que se ponen sus clientas, también.
5. Conoce la importancia de cada detalle para un look 10 (y sus peinados son la mejor prueba)
La actriz tiene un melenón rubio (aunque recientemente la hemos visto de castaña y de morena) que no necesitaría casi nada para estar perfecto. Sin embargo, ella no es de las que se conforman con unas ondas surferas y punto. Los recogidos deshechos, las trenzas deconstruídas o los semirecogidos especiales se han convertido en los peinados que todo el mundo le quiere copiar. La peluquera Sarah Potempa, conocida por su maña única para crear trenzas, y el estilista capilar experto en celebrities, Renato Campora, son los responsables de que la australiana jamás tenga eso que los americanos llamarían bad hair day.
6. Adapta las tendencias a su estilo, no su estilo a las tendencias
En cuanto a los estilismos que elige para pasear por la ciudad, visitar un plató o acudir a un evento de tarde, la actriz se apunta a los hombros descubiertos, las faldas y vestidos midi o la mezcla de estampados sin perder su identidad. Se atreve con prendas en tendencia pero no renuncia al minimalismo ni a la combinación blanco-negro que tantas veces ha lucido. Hace concesiones al bautizado como ‘caos mágico’ y es capaz de ir a la moda pero nunca resulta demasiado estridente ni se pone cualquier prenda solo porque se lleve. No, probablemente no la veamos vestida de Vetements.