24 fotos

Los peor vestidos de la noche de los Oscar

No todo es elegancia en la alfombra roja más importante del año. Repasamos los errores y peores estilismos de esta edición.

La llegada de Blanca Bianco a la alfombra roja despertó un aluvión de comentarios sarcásticos en Twitter. Su vestido, más propio de Katniss Everdeen en Los juegos del hambre que de la noche más glamourosa del año, pasará a la historia de los horrores de los Oscar.Getty/Cordon Press
Akosua Busia, pareja de John Singleton, se marca un Kim Kardashian con este escote imposible.Getty/Cordon Press
Shaun Robinson desafía la mala suerte con este Leanne Marshall amarillo. Ni el escote, ni el cinturón brillante ni la falda vaporosa la convierten en una de nuestras favoritas.Getty/Cordon Press
Siempre hay un look patinadora y esta vez le ha tocado a Katie Cassidy.Getty/Cordon Press
Lorelei Linklater es la hija de Richard Linklater, director de Boyhood, y una de las protagonistas de la historia. El diseño con flores orientales que eligió en los Oscar es indefendible.Getty/Cordon Press
Willow Bay, periodista y esposa de Bob Iger, vistió uno de los vestidos que Rodarte diseñó para esta temporada homenajeando a Star Wars. Una apuesta original pero poco adecuada.Getty/Cordon Press
El estampado del vestido que llevó Jamie Chun, a medio camino entre fuegos artificiales y estrellas, la coloca entre los peores estilismos de esta edición.Getty/Cordon Press
Al vestido de Isan Elba, hija de Idris Elba, le sobran volantes. El corte asimétrico y la mezcla de colores tampoco son nada favorecedores.Getty/Cordon Press
Las gafas de policía trasnochado y la cadena dorada bajo la camisa hacen que John Travolta se cuele en la lista negra de los estilismos de este año.Getty/Cordon Press
La actriz Nissa Kashani suspende por el color, corte y drapeado de este diseño. El peinado y los zapatos dorados son la guinda del pastel.Getty/Cordon Press
J.K Simons, que se llevó la estatuilla por su interpretación en Whiplash, acudió acompañado de su pareja, Michelle Schumacher. Ninguno de los dos brilló por su elegancia.Getty/Cordon Press
Chloë Grace Moretz estaba muy guapa con maquillaje natural y melena suelta. Sin embargo, la silueta imposible de este diseño de Miu Miu no le hacía justicia.Getty/Cordon Press
Bonnie Arnold, productora de películas de animación, no supo elegir un vestido adecuado a su edad y a su silueta.Getty/Cordon Press
A la modelo Dorith Mous le sienta bien el rojo de este Dennis Diem. El problema es el tejido brillante y arrugado de la falda y los zapatos imposibles.Getty/Cordon Press
El compositor Hans Zimmer intentó dar el toque original a su esmoquin con un fular estampado. El resultado no nos termina de convencer.Getty/Cordon Press
Scarlett Johansson posó muy seria en la alformba roja con este vestido de Atelier Versace. Hay algo en su estilismo que no funciona.Getty/Cordon Press
Anna Faris no acierta con este look 'demasiado princesa' que firma Zuhair Murad.Getty/Cordon Press
La editora y amiga de Oprah Winfrey, Gayle King, falla con este vestido que además de recordar a un camisón, no le sienta bien.Getty/Cordon Press
Alaïa firma el diseño hecho a medida que lució Lady Gaga. Sin embargo, el blanco de los comentarios y bromas en Internet han sido sus guantes, más propios de fregar que de una alfombra roja. En Twitter no han tardado en propagarse memes que así lo afirman.Getty/Cordon Press
La presentadora de E! Catt Sadler no aprueba con este diseño achampanado de Charbel Zoe. La red en el bajo y las aplicaciones metalizadas son poco favorecedoras.Getty/Cordon Press
He aquí el peligro de elegir un esmoquin blanco. Parece que Kevin Hart no aprendió nada presentando el primer desfile de moda de la NBA.Getty/Cordon Press
No es el mejor estilismo de Nicole Kidman. El binomio amarillo-rojo es complicado y los complementos no son los adecuados.Getty/Cordon Press
El escote de la actriz de Cheryl Hines y el excesivo brillo de su vestido no son nada actuales. El maquillaje, que hace que tenga el rostro demasiado moreno, termina de arruinar el look.Getty/Cordon Press
El vestido de la directora Torill Kove necesita unos toques de plancha.Getty/Cordon Press