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Fiascos, borracheras y piques de diva: los 15 momentazos de Mariah Carey

La diva neoyorquina actúa en Madrid el lunes en su tour navideño. Repasamos sus momentos más gloriosos en una carrera de éxitos.

El fiasco de la actuación de Año Nuevo en Times Square: Uno de los momentos más inolvidables de su carrera fue el bochornoso concierto que ofreció en la fiesta televisada de año nuevo en 2018. Los problemas comenzaron cuando, al cantar el Auld Lang Syne, a Carey se la veía incómoda al no poder escuchar a sus coros y tampoco podía mantener el equilibrio. En el segundo tema de su repertorio, Emotions, al continuar los problemas con el sonido y al no poder coordinar el playback con sus labios prefirió poner al público a cantar. “Voy a dejar que la audiencia cante”, manifestó. Histórico.
"Jennifer, ¿quién? No la conozco". Como buena diva, Mariah es la jefa absoluta del shade  hacia otras artistas. A principios los años 2000, afirmó ante una televisión extranjera que empezaron a preguntarle por la opinión que tenía de otras artistas que no sabía quién era Jennifer Lopez con su ya eterno: "No la conozco, no sé quién es". La duda se la han planteado después con los años porque obviamente han coincidido alguna que otra vez y siempre alude a lo mismo. "al parecer soy una persona que se olvida de las cosas"
Cuando llamó a Madonna vieja, al estilo Mariah. "La verdad es que no he prestado atención a Madonna desde que estaba, digamos, en séptimo cuando ella era popular, así que no he escuchado nada", contestó lanzando un doble dardo antológico a Madonna (insinuó que era vieja y ya no importaba), allá por 1995, y cuando le indicaron que Madonna había dicho que "prefería suicidarse" antes que escucharla.
Cuando aceptó un premio borracha. Carey fue galardonada a mejor actriz revelación en Palm Springs International Film Festival en 2010 por su papel en Precious. "¡Te quiero!", gritó antes de pedir perdón entre risas, refiriéndose a su estado de embriaguez al subirse al escenario. El vídeo vale su precio en oro.
"¡Deja de cantar mi parte, cariño!". Durante una actuación en 2008 en Good Morning América, mientras cantaba Touch My Body, Carey regañó en directo a una de las coristas y dijo en plena canción: "Deja de cantar mi parte, baby". Con Mariah no se juega.
Riendo en la limo Luis Miguel y ella fueron la pareja del momento en los noventa. Se conocieron en la nieve, de vacaciones en Aspen; grabaron juntos una balada, After Tonight, que al Sol de México no le gustó pero ella incluyó en su álbum Rainbow (con agradecimiento en español incluido a su novio) y dejaron la relación en 2001. Si finalmente Netflix hace una segunda temporada de Luis Miguel. La serie, esta historia podría estar incluida en la trama. Ya hay loterías para ver quién interpretaría a la diva.
All I Want For Christmas Is You, récord tras récord Mariah Carey lanzó este tema en noviembre de 1994, como single de su cuarto disco, Merry Christmas. Cuentan que compuso la canción en solo 15 minutos, y se ha hecho de oro con ella: The Economist calcula que le ha reportado unos ingresos de 53 millones de euros solo en royalties. Con el tiempo, se ha convertido en uno de sus temas más famosos, y suena Navidad tras Navidad en todo el mundo: acaba de volver a entrar en el Billboard Hot 100 (en el número 7; el año pasado estuvo en el 9 en estas fechas) y figura en el número 1 de las canciones de Navidad más reproducidas en Spotify.
La reina de las fiestas Parece que viene de un país donde siempre es Navidad. Y lo demuestra en su espectáculo All I Want For Christmas Is You Tour, que el 17 de diciembre llega al WiZink Center de Madrid, tras 18 años sin actuar en la ciudad. En 2010, embarazada de sus gemelos, se vistió de Mamá Noel para su especial navideño televisivo en la cadena ABC; el 31 de diciembre de 2016 recibió el Año Nuevo en Times Square; el vestido rojo es uno de los modelos que luce en esta gira, y, además, cuenta con su propia gama de dulces navideños, Mariah Carey Christmas Factory.
Su fijación con Papá Noel Ese amor por la Navidad la ha llevado a retratarse con uno de sus símbolos, Papá Noel, en infinitas ocasiones. De izquierda a derecha, en 1990, ya antes del éxito de su hit navideño del 94, dejó claro su gusto por el personaje, que le entregó el disco de platino por su álbum de debut; en 2001, como coanfitriona del Z100 Jingle Ball 2001 en el Madison Square Garden; en 2017 durante la presentación de sus dulces navideños en Seattle, y en 2012, bailando sobre el escenario con Papá Noel durante la iluminación del árbol de Navidad del Rockefeller Center.
Romanticismo al poder En 1993 se vistió de blanco y lució un ramo-jardín vertical en su enlace con el empresario musical Tommy Mottola (actual marido de Thalía) en Nueva York. El vestido, inspirado en el de Lady Di, era de Vera Wang, y mucho se ha escrito sobre la maldición de las famosas que lucieron la firma en sus enlaces. En 2008 contrajo matrimonio en Las Bahamas con el rapero Nick Cannon. En 2012 renovaron sus votos en el más romántico de los escenarios: París. Su tercera boda iba a ser en 2016 con el millonario australiano James Packer, con un Valentino hecho a medida, que ella quemó delante del mundo en su vídeo I Don't.
Cuerpo de baile A Mariah no le cuesta cantar en horizontal, mientras sus bailarines la sostienen, como demuestra en muchas de sus apariciones (en la imagen, durante un concierto junto a Lionel Richie celebrado en agosto de 2017 en Nueva York). Sus bailarines –ya sea vestidos de elfos navideños o mostrando torso mientras adoran a la estrella, como en la imagen de la derecha, de su última actuación, en octubre de 2018, en los American Music Awards– son una de las bazas de sus espectáculos.
¿Brillos? Más es más (y mejor) Otro ingrediente fundamental en sus puestas en escena son los brillos: bordados, lentejuelas, lúrex... En 2003 durante una actuación en París con cuerpo y mini bordados; en 2016 durante el tour Sweet Sweet Fantasy en Colonia; de rosa en 2003 en otra de sus giras, Charmbracelet Tour, en el Caeasars Palace de Las Vegas; dos momentos de su actuación en 2016 en el Essence Festival de Nueva Orleans y sumando brillos y pieles, una de sus combinaciones preferidas, en 2018 en Times Square.
El crop llevado al top Pionera y defensora del uso de crop tops sobre la alfombra roja. Asimetrías, cortes y juegos ópticos no fallan en su armario: con vestido de falsas transparencias en Los Ángeles en 2017; diez años antes, en 1997, durante la entrega de los MTV Video Music Awards, donde coincidió con las Spice Girls, otras adalides de los crop tops; en 2000 en el Madison Square Garden con uno de sus estilismos recurrentes, vaqueros y top de brillos, y en 2001, en versión vaqueros, cinturón Glitter y bandana al pecho durante una fiesta en su casa de Londres.
Con los gurús de la industria Ella es fiel a su propio estilo, pero siempre se ha codeado con los personajes más influyentes de la moda, desde Karl Lagerfeld (juntos en una cena celebrada en Nueva York en 2017 en honor del diseñador) a Giorgio Armani (en la imagen, de 1998, posan a la entrada de la gala benéfica Gypsy Passion) o la editora Anna Wintour (conversando con una jovencísima Mariah en 1990). De rojo y con gafas de sol, en el taller parisino de Azzedine Alaïa, uno de sus diseñadores favoritos, en junio de 2017, meses antes del fallecimiento del creador.
Suma de divas Ha compartido escenario con estrellas como Diana Ross (juntas en el homenaje a esta última celebrado en 2000 en el Madrison Square Garden de Nueva York) o Aretha Franklin, con quien cantó en 1998 en un concierto en el que también participaron otros iconos musicales, como Carole King, Shania Twain y Celine Dion en el Beacon Theatre de Nueva York.