La legendaria modelo Stephanie Seymour regresa desnuda a ‘Vogue’ Italia
La icónica ‘top model’ de los 90 deja de situarse detrás de la cámara de los grandes fotógrafos masculinos para tomar el control y ‘fingir’ que es ella misma quien dispara la cámara.
Prácticamente desnuda, subida a unos tacones negros y posando frente a una cámara que apunta, directamente, a su vulva. Así es la portada de Vogue Italia agosto protagonizada por la legendaria modelo estadounidense de 51 años Stephanie Seymour. La top mira desafiante al objetivo de la cámara que, parece, ella misma dispara con ayuda de un mando.
En realidad no es así: la fotógrafa detrás de la imagen es la neoyorquina ...
Prácticamente desnuda, subida a unos tacones negros y posando frente a una cámara que apunta, directamente, a su vulva. Así es la portada de Vogue Italia agosto protagonizada por la legendaria modelo estadounidense de 51 años Stephanie Seymour. La top mira desafiante al objetivo de la cámara que, parece, ella misma dispara con ayuda de un mando.
En realidad no es así: la fotógrafa detrás de la imagen es la neoyorquina Collier Schorr, cuyo trabajo siempre ha buscado explorar la identidad de género y la sexualidad en tiempos de feminismo. La intención de la imagen, sin embargo, sigue logrando el efecto pretendido. Una modelo de los 80 y los 90 siempre se ha situado delante de la cámara, fotografiada por grandes nombres como Herb Ritts, Richard Avedon, Gilles Bensimon o Mario Testino. Ahora es ella, sin embargo, quien toma el mando de la situación, y de su propio cuerpo, para mostrar lo que ella quiere.
Stephanie Seymour inició su carrera con tan solo 14 años. En 1983 se presentó al concurso Elite Model Look pero, aunque quedó entre las 12 finalistas, no ganó. Fue en aquel certamen donde conoció a John Casablancas, fundador de la agencia de modelos Elite Model y considerado el creador y precursor del concepto de ‘supermodelo’. Él fue quien fichó a Seymour para una agencia cuya cantera, en aquellos gloriosos 90, «no se levantaría de la cama por menos de 10.000 dólares» (como afirmó Linda Evangelista).
Seymour y Casablancas iniciaron una relación que terminó cuando el empresario se casó con la modelo Jeanette Christjansen. A finales de los 80 y principios de los 90 apareció en las portadas de Sports Illustrated y Vogue y fue uno de los primeros ángeles de la ahora agonizante Victoria’s Secret. En esa época, además de aparecer en varios números de la revista Playboy, Seymour inició una relación con el cantante Axl Rose de Guns N’ Roses que por aquel entonces se catalogaba de «tormentosa», pero que a día de hoy se consideraría violenta y, con ello, Seymour se convirtió también en uno de los rostros favoritos de las revistas del corazón.
Seymour continuó en activo en la década de los 2000 y en adelante. En 2014, se convirtió en la imagen de la marca de cosmética Estée Lauder. Pero su vida personal ha eclipsado en muchas ocasiones la profesional: desde la infidelidad de Seymour con Charlie Sheen mientras todavía estaba con Axl Rose, pasando por las denuncias cruzadas por malos tratos entre ella y el líder de Guns N’ Roses, hasta su reciente detención en 2016 por conducir ebria, Seymour ha acaparado tantos los focos de los grandes fotógrafos como de los paparazzi sedientos de exclusivas.
‘Stephanie by Stephanie’ de Vogue Italia parece ser la plataforma desde la que la modelo tiene, por fin, la ocasión de retratarse a sí misma. Al menos su portada es toda una declaración de intenciones.