Por qué Julia Roberts ha ido descalza en la alfombra roja de Cannes
¿Declaración de intenciones o excentricidad? La actriz pasea sin tacones por el Palacio de Festivales en plena rebelión contra la etiqueta que obliga a llevarlos.
La rebelión contra los tacones en Cannes empezó el año pasado y parece que Julia Roberts está dispuesta a ponerla de nuevo sobre la mesa este 2016. Así lo demostró anoche, cuando pisó la alfombra roja del Palacio de Festivales sin sandalias y radiante. La actriz presentaba Money Monster, cinta dirigida por Jodie Foster y coprotagonizada por George Clooney y decidió que nada mejor que pasear su Armani Privé de escote corazón sin zapa...
La rebelión contra los tacones en Cannes empezó el año pasado y parece que Julia Roberts está dispuesta a ponerla de nuevo sobre la mesa este 2016. Así lo demostró anoche, cuando pisó la alfombra roja del Palacio de Festivales sin sandalias y radiante. La actriz presentaba Money Monster, cinta dirigida por Jodie Foster y coprotagonizada por George Clooney y decidió que nada mejor que pasear su Armani Privé de escote corazón sin zapatos. Los llevaba puestos a su llegada, pero en algún momento de la alfombra se los quitó y no se molestó en esconder que no llevaba calzado. Se levantó el vestido varias veces ante las cámaras y mientras subía las escaleras del recinto. ¿Excentricidad dentro de esa manía que le ha dado a los famosos por andar descalzos? No, no parece que Roberts se haya apuntado al barefoot (aunque cabe recordar que se casó descalza con Lyle Lovett en 1993). Podríamos aventurarnos a decir que el gesto de la actriz podría venir cargado de intenciones.
El sambenito de festival machista sobre la escasa presencia femenina en el cartel del festival se repite cada año y en 2015, en pleno debate sobre la escasa presencia de directoras o de las miradas que aporta sobre las mujeres, la organización quedó en rídiculo cuando Screen Daily, periódico del gremio, denunció que un grupo de mujeres de unos 50 años habían sido expulsadas de la gala de proyección de Carol por no calzar tacones altos. Las mujeres, muchas de ellas con problemas médicos que les impidían llevarlos, no pudieron acceder al festival por calzar sandalias planas. «Alguien a quien conozco fue rechazada por llevar unas sandalias planas que eran bonitas, nada que ver con las que llevarías a la playa. Es una persona que ronda la cincuentena. Le dijeron que se fuese a casa y se comprara unos zapatos apropiados para volver», explicó una fuente anónima en la revista.El director del documental Amy (que después se llevaría el Oscar), también criticó en sus redes que exigiesen a su mujer ponerse tacones para acceder al recinto.
Ante la polémica y revuelo que levantó el estricto código de vestimenta algunas actrices, como Emily Blunt, decidieron boicotear al festival. «Todo el mundo debería llevar zapato plano, para ser sincera. Nadie debería llevar tacones hoy. Es muy molesto, justo cuando creías que estaban llegando nuevas olas de igualdad», denunció ante la prensa en la Croisette.
Este año las críticas se han repetido. Kristen Stewart, en la mesa redonda con la prensa de Cafe Society (la cinta de Woody Allen que protagoniza), también expresó su malestar con el desigual código de vestimenta en Cannes en función del género, tal y como recoge Vanity Fair. «Las cosas tienen que cambiar inmediatamente. Se ha convertido en algo muy obvio. Si un hombre y yo vamos por la alfombra roja y me paran y me dicen ‘perdone, señorita, pero no está llevando tacones y no puede entrar’ le diría ‘tampoco los lleva mi amigo. ¿Tiene que llevarlos él? Puede funcionar de las dos maneras. No me puedes preguntar algo que no le vas a preguntar a él. Entiendo que haya etiqueta, pero debería abrirse y poder ir con tacones o sin ellos».