Jennifer Lawrence o el verano del amor del ‘playboy’ galerista
Tras el auge por los cómicos de ‘Saturday Night Live’, la modalidad más pujante ahora mismo entre las estrellas femeninas es mantener una relación con especialistas del mundo del arte.
Dos profesiones se disputan, ahora mismo, el ser la más adecuada para ligar con una estrella: está la de guionista/productor/cómico en Saturday Night Live o ser marchante de arte/galerista. Por un lado, el mítico programa televisivo producido por Lorne Michaels en la NBC se ha convertido en apenas unos meses en el tinder de las estrellas: Scarlett Johansson (Colin Jost), Emma Stone (Dave McCary), Ariana Grande (...
Dos profesiones se disputan, ahora mismo, el ser la más adecuada para ligar con una estrella: está la de guionista/productor/cómico en Saturday Night Live o ser marchante de arte/galerista. Por un lado, el mítico programa televisivo producido por Lorne Michaels en la NBC se ha convertido en apenas unos meses en el tinder de las estrellas: Scarlett Johansson (Colin Jost), Emma Stone (Dave McCary), Ariana Grande (Pete Davidson) o Ben Affleck (Lindsay Shookus) han conocido a su última pareja allí. Por otro, cantantes y actrices obvian el cine para pasarse a las galerías artística y encontrar a sus ligues.
Tras una breve, pero intensa, relación con el director de cine Darren Aronofsky, Jennifer Lawrence ya no se esconde para exhibir su relación con Cooke Maroney, ya sea paseando por las calles de París o Nueva York. Maroney, a sus 33 años, dirige la Gladstone Gallery de Nueva York, un prestigioso local fundado en los 90 por Barbara Gladstone que representa a artistas como Richard Prince, Anish Kappor o Ugo Rondione. El galerista, que se relaciona con la élite VIP neoyorquina –forma parte del núcleo cercano de Bee Shafer, hija de Anna Wintour y es otra estrella más amiga de Derek Blasberg–, conoció a Lawrence a través de Laura Simpson, una amiga de la actriz.
Quien acaba de anunciar su compromiso con otro privilegiado galerista, Caspar Jopling, es Ellie Goulding. Tras una relación de un par de años, la cantante formaliza su relación con el sobrino de Jay Jopling, fundador de la White Cube de Londres –y anteriormente casado con la directora de Cincuenta sombras de grey, Sam Taylor-Johnson-. La pareja de la cantante, a sus 26 años y educado en la prestigiosa Eton, forma parte del equipo de arte contemporáneo de la popular casa de subastas Sotheby’s.
Otra que ha caído rendida a los encantos del mundo del arte es Amber Heard, que se dejó ver en el torneo de Wimbledon con Vito Schnabel, el marchante de arte –hijo del director Julian Schnabel– que más parejas del star system acumula: recientemente finalizó una relación de tres años con Heidi Klum pero anteriormente ya tuvo sus affaires con Demi Moore, Elle McPherson o Liv Tyler.
Los hombres del arte siempre han cotizado al alza: Meryl Streep se casó con el escultor Don Gummer, Bette Midler con el artista performativo Martin von Haselberg, Björk estuvo más de una década Mathew Barney y Mary Kate Olsen salió un par de años con el artista Nate Lowman. Quién diría, pese a los antecedentes, que el verano de 2018 se convertiría en el estío en el que el playboy galerista de alto nivel se confirmase como el ligue oficial de las estrellas.