Otro Kennedy guapo, rico y de perfil político: Jack Schlossberg, digno sucesor de su tío John John
El hijo de Caroline Kennedy y nieto de JFK, que guarda un gran parecido físico con su recordado tío, se perfila como la gran esperanza de la familia ya que no descarta dedicarse a la política en un futuro.
El 19 de julio del año que viene se cumple el 20 aniversario de la trágica muerte de John John Kennedy, su mujer, Carolyn Bessette y su cuñada, que fallecían en un accidente de aviación cuando solo les faltaban doce kilómetros para llegar a Hyannis Port, donde se encuentra el cuartel general de la familia y escenario de la boda de su prima Rory Kennedy, que, lógicamente, fue suspendida. Una tragedia que marcó profundamente el devenir de esta poderosa saga familiar, a la que desde los inicios del siglo XX también han perseguido el infortunio y los escándalos.
La desaparición a la prematu...
El 19 de julio del año que viene se cumple el 20 aniversario de la trágica muerte de John John Kennedy, su mujer, Carolyn Bessette y su cuñada, que fallecían en un accidente de aviación cuando solo les faltaban doce kilómetros para llegar a Hyannis Port, donde se encuentra el cuartel general de la familia y escenario de la boda de su prima Rory Kennedy, que, lógicamente, fue suspendida. Una tragedia que marcó profundamente el devenir de esta poderosa saga familiar, a la que desde los inicios del siglo XX también han perseguido el infortunio y los escándalos.
La desaparición a la prematura edad de 39 años del hijo del recordado John Fitzgerald Kennedy y de su mujer, publicista de Calvin Klein, dejó sin uno de sus herederos naturales a un clan por cuyas venas corre el veneno de la política. Aunque estaba claro que él había decidido seguir otros derroteros y era editor de George, una revista de lifestyle, que dejó de publicarse dos años después de su muerte porque así lo decidió su hermana, Caroline, quien consideró que ese habría sido el deseo del que fuera elegido el hombre más sexy vivo del mundo por la revista People en 1988.
Dos décadas después, los medios estadounidenses han encontrado en la figura de Jack Schlossberg, sobrino del carismático John John, a su plausible sucesor. Con solo 25 años, ya se ha convertido en una figura con gran fuerza mediática y ha dejado la puerta abierta a seguir con la tradición familiar y los pasos de su abuelo materno, JFK, el asesinado presidente de Estados Unidos, a quien no llegó a conocer.
A continuación te contamos todo lo que debes saber sobre un hombre que parece destinado a protagonizar los siguientes capítulos de la familia Kennedy en las próximas décadas…
Heredero del estilo (y pectoral) de John John
El año pasado la edición estadounidense de Vanity Fair le incluyó en la lista de los hombres más elegantes del mundo, en la que aparecía, entre otros, al lado del tenista Roger Federer, el cantante Harry Styles o Justin Trudeau, primer ministro de Canadá. Más allá del evidente parecido físico con su tío y hasta de su similar corte de pelo, el hijo de Caroline Kennedy es también clásico a la hora de vestir y muy reposado en sus intervenciones públicas, que hasta el momento no han sido demasiadas.
Luce un cuerpo tonificado y fibrado en su Instagram, que también nos retrotrae a ciertas fotografías que se publicaron en su día del infortunado hijo de JFK, al igual que él, un consumado deportista. La naturalidad, la falta de afectación y una aparente despreocupación por su atractivo físico son las características que han determinado que se convirtieran en dos referentes, aunque en el caso de Jack aún le queda un largo camino que recorrer.
Un Instagram sin complejos
Bajo una apariencia de chico serio y estudioso, se esconde un hombre con un gran sentido del humor, que se confiesa fan de la estrella de acción Dwayne ’The Rock’ Johnson, y tiene un perro al que ha llamado Chester, pues le encuentra un gran parecido físico con Chester Alan Arthur, quien fuera presidente de Estados Unidos entre 1881 y 1885. Su perfil de Instagram, donde cuenta con algo más de 22.000 followers, nos da, además, algunas pistas sobre su personalidad.
Perfil discreto
No son ni uno ni dos los Kennedy que se han caracterizado por ser mujeriegos, tener problemas con los estupefacientes o se han visto involucrados en episodios escabrosos. Uno de los más recientes lo ha protagonizado Conor Kennedy, hijo de Robert Kennedy jr. y ex de Taylor Swift, que se vio envuelto en una pelea en un bar de Aspen y en febrero del año pasado se declaró culpable para evitar ir a la cárcel. No puede decirse que experiencias de este tipo las haya vivido Jack Schlossberg ni que el suyo haya sido un hogar disfuncional, como el de muchos de sus familiares. Todo lo contrario: ha crecido en el seno de una estructura afectiva sólida y estable.
Su madre, Caroline Kennedy, ha llevado siempre una vida muy de perfil bajo y ha sido noticia, sobre todo, por su desempeño profesional. Se casó en 1986 con el artista y empresario Edwin Schlossberg, trece años mayor que ella, con un vestido que le diseñó Carolina Herrera siguiendo sus directrices, sobrio y elegante, muy en la línea de su personalidad, y han tenido tres hijos, Jack, y sus dos hermanas mayores, Rose y Tatiana, que nacieron en 1988 y 1990, respectivamente.
Edwin Schlossberg, su marido, es propietario de la compañía ESI Design, cuya oficina principal se encuentra en la emblemática Quinta Avenida de Manhattan y que durante cuatro décadas se ha dedicado a diseñar con gran éxito innovadoras experiencias interactivas en edificios, empresas y museos. El último trabajo de Caroline, por su parte, ha sido estar al frente de la embajada de Estados Unidos en Japón entre 2014 y enero de 2017, cuando renunció al cargo, después de la victoria electoral de Donald Trump, cuyas ideas son diametralmente opuestas a la suyas.
Influido por la moda
Que Caroline Kennedy haya sido embajadora de Estados Unidos en Japón ha supuesto que sus hijos tengan experiencias muy enriquecedoras en el país del sol naciente. Jack acompañó a su madre en numerosas actos relacionados con su trabajo y en 2014 visitó con ella las instalaciones de la central de Fukushima, donde tres años antes se había producido el mayor accidente nuclear desde Chernobyl en 1986: sus imágenes con los preceptivos trajes para protegerse de las radiaciones dieron la vuelta al mundo y sirvieron también para dar visibilidad a los problemas de la región.
Ya de vuelta en su país, tras su dimisión como embajadora, Caroline acudió a la gala MET de Nueva York acompañada por Jack, que supuso su debut como celebrity. Vestido con un sencillo traje negro, una camisa blanca y una corbata gris estampada lo tenía muy complicado para competir con el modelazo que había elegido su madre de la diseñadora Rei Kawakubo, fundadora de la firma Comme des Garçons, de quien se hizo amiga durante su estancia en Japón y a quien se rendía homenaje esa noche.
El llamativo vestido floral oversize de Caroline Kennedy suscitó comentarios de todo tipo, así que en una entrevista que concedió al programa de televisión Today Show, unos días después, manifestó con sentido del humor que “tuve que convencer a todo el mundo para ponérmelo”.
Con la formación más elitista
Educado en la religión católica, que profesa su madre, Jack Schlossberg también sigue algunas tradiciones judías, religión de los ancestros de su padre, oriundos de Ucrania. Al igual que su tío John John, estudió el Collegiate School, en el Upper West Side de Manhattan, uno de los centros escolares más antiguos y elitistas del país, antes de dar el salto a la universidad de Yale, donde se graduó en 2015 en Historia. En la actualidad cursa un postgrado en Derecho y Negocios en Harvard.
Sin carrera definida
En la mencionada entrevista Today Show en la que Caroline Kennedy hablaba de su vuelta a la Gala Met tras más de quince años de ausencia estaba acompañada por Jack, a quien le preguntaron si sentía sobre sus hombros el peso del apellido materno. Con gran aplomo y seguridad ante las cámaras, respondió: “Me inspira el legado familiar de servicio público, es algo que me hace sentirme orgulloso, pero todavía estoy tratando de labrarme mi propio camino y no tengo nada decidido”.
Un año más tarde, Jack regresaba al programa matinal de la NBC y tampoco nos sacaba de dudas sobre sus derroteros profesionales: “No sé qué me deparará el futuro. Siento que soy más inteligente desde que estoy en Harvard y, com joven que soy, me encuentro en un momento muy interesante en el que hay muchos problemas que solventar en nuestro país y me gustaría participar de esta experiencia”.
Los presentadores también le preguntaron su parecer sobre el cameo que ha realizado en la serie Blue Bloods, que emite desde hace ocho años la CBS y en la que ha interpretado a un policía: “Ahora la gente me llama agente… No creo que vaya a tener una carrera como actor. Fue algo divertido para mí, es mi serie favorita y para mi fue un sueño hecho realidad”.
El nieto de JFK ha dado, pese a su juventud, muestras de una gran versatilidad: fue becario del senador John Kerry, ha escrito columnas de opinión en Time y The Washington Post, ha trabajado para Rakuten, una de las e-commerce más grandes de Japón, y también para Suntory Holdings Limited, una gran distribuidora de bebidas alcohólicas del país asiático, y ahora está centrado en su postgrado.
Jack ha manifestado que si su madre se planteara dar el salto a la política le apoyará y ella también haría lo propio si finalmente se decide a seguir con la tradición familiar. El tiempo tiene la última palabra.