Paris Jackson es el nuevo rostro favorito de la moda
La hija mediana del rey del pop se ha sentado en los desfiles de Givenchy y Dior, posará en la nueva campaña de Chanel y es la última portada de ‘Rolling Stone’. No hay duda: este es solo el principio.
Cuando en tu partida de nacimiento puede leerse ‘Paris-Michael Katherine Jackson’ no hay duda de que, para bien o para mal, estás condenada a formar parte del mundo de la farándula. No tanto por la sonoridad del nombre sino, sobre todo, por el inconmensurable peso del apellido Jackson. Por eso era cuestión de tiempo que la hija del rey del pop diese sus primeros pasos firmes como candidata a ostentar el manido título de it girl. Los acontecimientos que así lo confirman han ido rodados: el pasado 8 de enero se dejó caer por la fiesta pos Globos de Oro que organizó Warn...
Cuando en tu partida de nacimiento puede leerse ‘Paris-Michael Katherine Jackson’ no hay duda de que, para bien o para mal, estás condenada a formar parte del mundo de la farándula. No tanto por la sonoridad del nombre sino, sobre todo, por el inconmensurable peso del apellido Jackson. Por eso era cuestión de tiempo que la hija del rey del pop diese sus primeros pasos firmes como candidata a ostentar el manido título de it girl. Los acontecimientos que así lo confirman han ido rodados: el pasado 8 de enero se dejó caer por la fiesta pos Globos de Oro que organizó Warner Bros, diez días después los paparazzi la pillaron en París posando en la nueva campaña de Chanel, en las semanas de la moda masculina ocupó el codiciado front row de Givenchy y Dior y es la última portada de la revista Rolling Stone. Pruebas suficientes para afirmar que Paris Jackson es el nuevo rostro favorito de la moda.
Jackson, fruto del fugaz matrimonio de la desaparecida leyenda con la enfermera Debbie Rowe, cumplirá 19 años el próximo mes de abril. Puede que el mundo entero la siga recordando como aquella niña que, en un acto de considerable madurez para tener solo 11 años, fue capaz de pronunciar el emotivo discurso en el funeral de Michael Jackson en el que, entre lágrimas, decía que «había sido el mejor padre que podía haber tenido». Pero ha llovido mucho desde aquello y la transformación física y personal de Paris Jackson es asombrosa. Ha pasado de ser la adolescente de melena prerrafaelita que confesaba sus deseos de ser actriz a Oprah Winfrey y se dejaba ver en varios documentales sobre la vida de su padre, a lucir melenita oxigenada y múltiples tatuajes por todo el cuerpo.
Es precisamente esa mezcla entre sus angelicales facciones y su look con altas dosis de actitud la que parece haber conquistado al mismísimo Karl Lagerfeld. Las imágenes en las que Jackson posaba frente a la torre Eiffel escoltada por varios modelos ataviados como soldados de la Segunda Guerra Mundial se filtraban hace unos días y ya han dado la vuelta al mundo. Al parecer, la joven hará su debut como modelo posando en la nueva campaña de Chanel. La maison francesa, especialista en encumbrar a millenials ‘hijas de’ (lo hizo con Georgia May Jagger –hija de Mick Jagger y Jerry Hall-, Willow Smith –la más pequeña del matrimonio de Will Smith y Jada Pinkett Smith– y Lilly-Rose Depp –retoño de Johnny Depp y Vanessa Paradis–); la ha elegido como nuevo rostro Chanel. El look que lucirá en la campaña, protagonizado por labios rojos, cejas marcadas y melena recogida con un pañuelo, le ha valido la comparación de la prensa internacional con Madonna. Y sin duda el parecido es innegable.
Pero a Paris Jackson no le vale con ser musa de Chanel. Su gran debut en la industria tuvo lugar en el front row del desfile masculino de Givenchy, en el que apareció con un jersey de la firma en el que podía leerse «I fell love» y se dejó fotografiar junto a la reputada editora de moda Carine Roitfeld. Al día siguiente del desfile repetía periplo para Dior. Sentada al lado de Maria Grazia Chiuri, flamente nueva directora creativa de la maison, y del rapero A$AP Rocky, la hija mediana de la leyenda de la música se movía como pez en el agua posando ante las cámaras y luciendo total look de la firma francesa. En su cuenta de Instagram ya se define como modelo y actriz e incluye el contacto de su mánager, Tom Hamilton, al que sin duda no va a dejarle de sonar el teléfono los próximos meses.
Es en la red social donde ya congrega casi 100.000 seguidores y da buena cuenta tanto de sus pinitos en la moda como de sus nuevas amistades: Bella Hadid o Sofia Richie protagonizan dos de sus publicaciones más recientes. Los likes se disparan cuando comparte imágenes de su infancia, tórridos días de playa junto a su novio (Michael Snoddy, batería del grupo punk rock Street Drum Corps), sus recurrentes frases motivacionales o su activismo a favor de las mujeres y el medioambiente. Lejos quedan aquellos tristes tuits que solía publicar hace unos años y que terminaron con aquel intento de suicidio que colocó su nombre en los titulares de la prensa amarilla. La nueva vida de Paris Jackson parece reconducida a perseguir con constancia lo que desde pequeña tuvo claro: triunfar.
Tanto es así que, haciendo oídos sordos a los deseos de su padre de que ninguno de sus hijos firmase ningún contrato para el mundo del espectáculo hasta cumplir los 18, hace años que Paris se comprometió a protagonizar su primera película. Lundon’s Bridge and the Three Keys verá la luz este año y, aunque en IMDB no recogen su nombre en el reparto, parece que será su debut en la gran pantalla. Con un argumento bastante fantasioso, la joven podría interpretar a un bióloga marina que habita en un universo de desfiles que se convierten en seres humanos y hechizos que transforman a los adolescentes en libélulas. A pesar de que su tía Janet enfureció al enterarse de la noticia, la joven justificó su decisión explicando que la película contiene un mensaje medioambiental: “Sé que mi padre siempre intentó salvar el mundo y creo que sería genial seguir sus pasos”, confesó hace unos años en el programa de Ellen Degeneres. Su empeño en trabajar como actriz a pesar de la oposición inicial de su familia certifica su fuerte personalidad y carácter, los mismos con los que consiguió que el canal británico Sky retirara un capítulo de la comedia Urban Myths en el que un actor blanco –Joseph Fiennes– interpretaba a un cantante negro, su padre. La cadena explicó en un comunicado que eliminaría el episodio ante la preocupación mostrada por Paris, que tras ver las imágenes escribió en su cuenta de Twitter: «Estoy tan increíblemente ofendida… igual que lo está también mucha otra gente, honestamente, me da ganas de vomitar».
No hay duda de que Paris Jackson piensa mantener un perfil muy alejado de la infancia semioculta que le fue impuesta. Liberada de las estúpidas máscaras (como ella misma las llamó) que le ponía su padre, la joven promete convertirse en un rostro recurrente del mundo del espectáculo y de la industria de la moda. Si su padre solía llevar prendas de Dior o Givenchy, su hija ya las ve desfilar sentada en primera fila. Y quién sabe si pronto será ella misma quien las presente encima de la pasarela.