Helena Bonham Carter: el icono inesperado
Vanity Fair la incluyó en la lista de las mejor vestidas y hasta ella misma pensó que era una broma.
Como todo lo que hace en su vida, a Helena Bonham Carter también le gusta divertirse con la ropa. Su excentricidad da lugar a looks inimitables cargados de referencias a sus orígenes británicos y a sus propias musas. Una de ellas es la reina María Antonieta y en sus voluminosos peinados es fácil encontrar similitudes. Las grandes damas de otras épocas también están presentes en su estilo. Con su primer papel principal en Una habitación con vistas (1985) empezó su especialización en películas históricas. Pronto la etiquet...
Como todo lo que hace en su vida, a Helena Bonham Carter también le gusta divertirse con la ropa. Su excentricidad da lugar a looks inimitables cargados de referencias a sus orígenes británicos y a sus propias musas. Una de ellas es la reina María Antonieta y en sus voluminosos peinados es fácil encontrar similitudes. Las grandes damas de otras épocas también están presentes en su estilo. Con su primer papel principal en Una habitación con vistas (1985) empezó su especialización en películas históricas. Pronto la etiquetaron como «la reina del corsé» porque sus personajes, todos victorianos, también parecían ser la mayor influencia estética en su vida. Helena no es fashion victim, pero disfruta de la moda a su manera y tiene claras sus preferencias.
Apoya la industria británica y es habitual verla vestida de Vivienne Westwood y con accesorios de Lulu Guinness. Ambas son además amigas personales. También hizo su incursión en la industria con una línea de ropa, Pantaloonies, inspirada en la lencería decimonónica, pero con un toque personal: el patchwork. Incluso se vendió en Harrods. Marc Jacobs se ha dejado seducir por la actriz esta temporada y la ha escogido como imagen de su última campaña. Y lo único que le ha exigido es que sea ella misma. En 2010 la incluyeron en la lista de los mejor vestidos de Vanity Fair al lado de trendsetters como Diane Kruger. La primera sorprendida fue ella: «Cuando me lo contaron pensé que era una broma».
La capacidad de Helena para convertirse en musa se plasma también en cómo ha vinculado su vida laboral y personal. Sus compañeros se han convertido en sus parejas. En la lista están Kenneth Branagh y Steve Martin. Sentó la cabeza con Tim Burton, con quien comparte aún hoy su pasión por lo gótico y una mansión en Londres dividida en dos. Lo suyo viene desde la cuna. Nació en una familia aristocrática. Bisnieta de primer ministro, nieta de una activista política y un diplomático español, que salvó a miles de judíos en el Holocausto, tiene un lejano parentesco con la propia Catalina Middleton. Sus raíces son tan poco comunes como ella misma.
Entre sus preferidos, el tartán.
Cordon Press