Por qué el estilo de Katie Holmes sigue despertando más fascinación que el de ninguna otra famosa
La actriz de 43 años ha renovado este 2021 su título de prescriptora de moda más alabada de Hollywood gracias a ‘looks’ prácticos, minimalistas y fáciles de imitar.
La trayectoria de Katie Holmes contradice ese dicho popular que asegura que “todos tenemos dos vidas y la segunda empieza cuando nos damos cuenta de que solo tenemos una”. Desde que llegara a Hollywood, la actriz ha contado con, al menos, tres vidas, y con 43 años recién cumplidos podríamos afirmar que está incluso a las puertas de la cuarta. La conocimos por su faceta como referente juvenil y noventero en la serie Dawson Crece, que la situó desde 1998 como una de las grandes promesas de la industria. Después, allá por 2005, tuvo un flirteo con el estrellato de la mano de películas co...
La trayectoria de Katie Holmes contradice ese dicho popular que asegura que “todos tenemos dos vidas y la segunda empieza cuando nos damos cuenta de que solo tenemos una”. Desde que llegara a Hollywood, la actriz ha contado con, al menos, tres vidas, y con 43 años recién cumplidos podríamos afirmar que está incluso a las puertas de la cuarta. La conocimos por su faceta como referente juvenil y noventero en la serie Dawson Crece, que la situó desde 1998 como una de las grandes promesas de la industria. Después, allá por 2005, tuvo un flirteo con el estrellato de la mano de películas como Batman Begins y Gracias por fumar que acabó siendo opacado por el ruido mediático de su matrimonio con Tom Cruise. Cuando su perfil parecía más que amortizado, separada desde 2012 del intérprete y lejos ya de la primera línea de la industria, la tercera reinvención de Holmes la llevó a erigirse en un inesperado icono del street-style, que durante los últimos tres años ha hecho de ella una protagonista habitual de las revistas de moda. Y haríamos mal, teniendo en cuenta su faceta como directora de cine –con dos películas pendiente de estreno– en desechar la cuarta venida de la estrella que mejor ha sabido reinventarse en la meca del cine.
“A mí solo me gusta vestir lo que es sencillo y simple”, confesaba Katie Holmes hace unas semanas en un homenaje que H&M le brindaba a Iris Apfel en el marco de la semana de la moda de Nueva York. Es precisamente esa aparente simplicidad y practicidad por la que aboga la estadounidense una de las claves de hace que su propuesta estética siga calando tanto entre las entendidas en moda. Sus apuestas se alejan de la complejidad, impostura o exclusividad de los looks de alfombra roja a los que nos tienen acostumbrados las celebrities, y abraza un estilo creíble, imitable y con algunas piezas al alcance de la mayoría de presupuestos. Eso sí, dotando de un cariz especial hasta prendas tan masivas como unos vaqueros azules. Como sostiene el periodista de Vogue USA Alex Kessler, su estilo le ha permitido seguir siendo “la vecina favorita de todo el mundo”, como ya lo fuera del enamoradizo protagonista de Dawson Crece.
Basta con escribir su nombre en Google Noticias para encontrar cada semana decenas de artículos que analizan y alaban sus apariciones. La combinación de zapatillas New Balance con pantalones de vestir, la de mocasines de puntera cuadrada con vaqueros, el vestido camisero midi con botas de invierno o el jersey con estampado de cebra son solo algunos de sus hallazgos reseñados en estas últimas dos semanas. Tal es la influencia de cada salida rutinaria de Katie Holmes por las calles de Manhattan, normalmente acompañada de su hija Suri y mientras hace los recados más mundanos, que la actriz ha conseguido poner en el mapa global de la moda a firmas antes desconocidas.
El más célebre hallazgo tuvo lugar a finales de agosto de 2019, cuando convirtió en viral el look compuesto por cárdigan y sujetador de cachemir de Khaite, firma neoyorquina que experimentó una explosión repentina de popularidad y demanda –se agotó en una hora en la tienda web– a raíz de la publicación de las imágenes. Un conjunto calificado como el de la “venganza” por aparecer con él justo después de anunciar su ruptura con el también actor Jamie Foxx y que hasta Zara terminó colando en su catálogo en versión low cost.
Pero desde entonces también ha sabido mezclar con acierto prendas de firmas asequibles como Mango o Gap con los objetos más deseados por las más ávidas consumidoras de tendencias: las sandalias acolchadas de Bottega Veneta, un vestido flossing de Christopher Esber o un abrigo de Nanushka, por citar solo algunos ejemplos. La estilista de Holmes, Allison Bornstein, es una de las máximas responsables de la posición de icono a seguir que ostenta ahora mismo la intérprete y su cuenta de Instagram está repleta de buenos consejos a seguir para cualquiera que desee optimizar su armario y no cuente con el sueldo de una estrella del séptimo arte.
Este renacimiento estilístico va ligado a una reinvención profesional que, al igual que hicieran otras actrices de Hollywood como Olivia Wilde, Maggie Gyllenhaal, Halle Berry o Greta Gerwig, la ha llevado ahora a situarse detrás de la cámara. Tras estrenar en 2016 su ópera prima, Todo lo que teníamos, los próximos proyectos serán otras dos películas como cineasta. Una vez terminada la grabación de la comedia romántica Alone Together esta primavera, sobre dos extraños que se enamoran cuando acaban por accidente en el mismo apartamento turístico; ahora se encuentra inmersa en el rodaje del drama Rare Objects, acerca de una mujer que trata de rehacer su vida cuando comienza a trabajar en un anticuario. Cansada quizá de esperar que le ofrezcan el papel definitivo, Holmes ha decidido tomar la iniciativa y protagonizar también sendos filmes. Todo apunta a que en 2022 seguirá generando tantos titulares y fascinación como hasta ahora.