Esta noche empieza ‘Operación Triunfo’: ¿merece la pena volver a engancharse?

Lo que el pasado año ocurrió con el retorno de Operación Triunfo, seis años después de tomarse un descanso de la pequeña pantalla por agotamiento, pilló a muchos por sorpresa. El talent musical volvió renovado con caras nuevas, con un plantel de numerosos concursantes carismáticos y apostando fuertemente por ese target de público más joven al que le pilló demasiado pequeño las primeras ediciones emitidas en la televisión pública y, posteriormente, en Telecinco. Las inquietudes de los adolescentes de nuestros días se mostraron con total naturalidad en horario de ...

Lo que el pasado año ocurrió con el retorno de Operación Triunfo, seis años después de tomarse un descanso de la pequeña pantalla por agotamiento, pilló a muchos por sorpresa. El talent musical volvió renovado con caras nuevas, con un plantel de numerosos concursantes carismáticos y apostando fuertemente por ese target de público más joven al que le pilló demasiado pequeño las primeras ediciones emitidas en la televisión pública y, posteriormente, en Telecinco. Las inquietudes de los adolescentes de nuestros días se mostraron con total naturalidad en horario de prime time y, lo que es más importante, el fenómeno traspasó la televisión y se afianzó a través de las redes sociales y un veinticuatro horas que provocó que miles de personas se quedaran pegadas a Youtube a diario para seguir en tiempo real la evolución de los aspirantes a cantantes. Mediaset, sin ir más lejos, ha tomado nota de ello empezando a colgar material propio en Youtube y hasta dejando ver los primeros diez días de Gran Hermano VIP en la citada plataforma de vídeos, demostrando (por si había alguna duda) que en estos tiempos hay que renovarse porque el tradicional consumo de televisión ha mutado radicalmente.

La edición de 2017 arrancó un 23 de octubre, hace menos de un año, y esta misma noche retoma sus emisiones en TVE. Puede parecer precipitado, y lo es, pero resulta lógico que no se quiera desaprovechar la ocasión para seguir estirando un chicle que consiguió congregar a un 30,8% de la cuota de share hace apenas unos meses en su gala final. Ahora bien, hay varios elementos a tener en cuenta. Por un lado, muchos de los concursantes de la temporada pasada están iniciando ahora mismo sus carreras en solitario (por muchos singles que algunos hayan lanzado, de momento nadie se ha atrevido a editar un álbum de debut propiamente dicho) y, curiosamente, tendrán como rivales mediáticos a la nueva hornada de este año. Y no por ello menos importante, está por verse si esta nueva generación de triunfitos que esta noche conoceremos está realmente a la altura de los pasados. En un programa de estas características el talento no lo es todo y muchas veces prima el carisma innato, así que habrá que estar atento a estos primeros días para comprobar si el equipo de casting de la productora ha acertado con su selección.

Puede haber tantos triunfitos en activo entre los de la pasada temporada y esta que el mercado bien podría colapsarse, como ya ocurrió en los primeros años del concurso. No obstante, el reto de esta edición estará en si florecerá por méritos propios una nueva Amaia que encandile al público sin medias tintas. La ganadora del 2017 enamoró a todos casi desde el primer momento que puso sus pies en la Academia, por lo que es entendible que en esta ocasión se quiera repetir el fenómeno Amaia con una cara nueva. El tiempo dirá si esto acaba aconteciendo.

En la gala O de esta noche el jurado tendrá que hacer una pequeña criba porque de los dieciocho aspirantes sólo dieciséis se convertirán en alumnos oficiales de la escuela. Dejando de lado que hace pocos días ya hubo una baja porque uno de los aspirantes, José Antonio, rechazó entrar a la Academia para seguir con sus estudios de Medicina, en lo que respecta al resto de posibles alumnos, por lo que poco que ha trascendido, hay de todo: desde María Villar, una joven madrileña que ya hizo sus pinitos en la banda Brainfreeze y que al parecer tiene muy buena relación con las Hinds, pasando por un sevillano llamado Rodrigo que quien esto escribe vio con sus propios ojos actuar este verano en un espectáculo de Port Aventura. Mención aparte merece el catalán Luis Mas, a quien muchos han atacado en las redes sociales alegando que tiene un perfil demasiado pijo para el programa, o nombres artísticos tan discutibles a bote pronto como el de Carlos Right o Famous.

Está por verse también si afectará de algún modo en los datos de audiencia las marchas de Guille Milkyway como profesor de cultura musical (ahora sustituido por Miqui Puig, quien ya hiciera sus pinitos en el mundo de los talent shows como jurado en las dos primeras ediciones de Factor X) y de Mónica Naranjo, cuya silla ahora ocupará Ana Torroja en las galas. Aunque el adiós más doloroso es el que protagonizarán Los Javis, ausentes en esta edición y reemplazados por la actriz Itziar Castro. Muchas son las preguntas que sobrevuelan, pero a partir de esta noche empezaremos a salir de dudas.